El 70% de las empresas españolas no tienen ningún plan contra la gripe A

Con la colaboración de empresarios y sindicatos, el Ministerio de Sanidad publicó el pasado julio una guía informativa con el doble objetivo de preservar la salud de los trabajadores y garantizar la actividad profesional. «El documento es excelente, pero la preparación que estamos testando es muy baja. El punto débil de la empresa española es la planificación ante los riesgos laborales: les cuesta invertir tiempo y dinero ante sucesos de baja probabilidad pero alta intensidad», advierte Juan García Gay, responsable de Consultoría en Continuidad de Negocio de Marsh.

Los datos sentencian un índice de contagio que podría alcanzar a un tercio de los 19 millones de trabajadores en España, que podrían ausentarse de su puesto una media de 6,5 días cada uno, lo que lleva a estimar un coste a las empresas españolas de más de 3.000 millones de euros en bajas laborales y freno en el consumo. Para Carmelo Plaza, secretario de Salud Laboral de Comisiones Obreras en la Comunidad de Madrid, el escenario es excepcional «y requiere medidas excepcionales: utilizar los recursos laborales que tenemos, coordinación total entre Gobierno y comunidades autónomas y crear comisiones de seguimiento para el control de la evolución de la epidemia».

Proteger a los trabajadores

Crítico con el plan de contingencia de Sanidad, Plaza desvela que el objetivo fundamental es proteger la salud de los trabajadores. «A partir de ahí se derivan otros, como la continuidad de la empresa o la minimización de los efectos negativos de la paralización de la actividad».

El departamento de Sanidad en Estados Unidos ha pedido a los empresarios que sean flexibles con las bajas laborales por la gripe A. «Eso son medidas excepcionales -puntualiza Carmelo Plaza-, una cuarentena impuesta por contagio de un familiar o la recomendación médica de no acudir al centro de salud para gestionar la baja puede darse de bruces con el miedo a una sanción o incluso a la pérdida del trabajo en caso de contratos temporales».

Para Plaza urge una concienciación de las empresas al problema de salud pública al que nos enfrentamos. «Tengo la percepción de que las empresas están ahora mismo más preocupadas por la crisis económica que no están trabajando en la otra línea. De hecho, hay un descenso de la inversión en prevención de riesgos laborales».

¿Cuánto costaría a las compañías un plan de riesgos «ad hoc» a la pandemia que nos viene encima? Aunque algunas estimaciones cifran en 90.000 euros la elaboración de un plan de prevención, actuación y seguimiento que podría ultimarse en dos semanas como máximo, desde Marsh, multinacional de consultoría de riesgos y seguros, prefieren no precisar un coste «que dependerá del tamaño de la empresa, su actividad y qué protocolos tenga ya activados», indica García Gay.

Aunque, en opinión del secretario de Salud Laboral de CC.OO. el plan presentado por Sanidad «es mejorable», la mayoría de las entidades lo atesoran como una biblia con la que resolver cualquier contingencia relacionada con la nueva gripe que ataque su empresa. Así lo evidencian desde Renfe y Campofrío, compañías que aseguran estar preparadas para la epidemia.

Por su parte, el grupo Santander cuenta con un protocolo interno coordinado por el departamento de Salud y Prevención del banco. «En esta línea estamos realizando un seguimiento exhaustivo de los empleados que viajan a países de alto riesgo, la aplicación de las políticas de prevención gubernamental, distribución entre los empleados de las recomendaciones para evitar el contagio (canales internos) y protocolos en la asistencia de visitas», recalcan desde esta compañía.

Permanente comunicación

La comunicación interna entre los trabajadores y una política de información a prueba de absentismo son dos de las claves a la hora de ejecutar un plan de contingencia de estas características. Paradigmática en estos casos se erige Coca Cola España, que lleva meses poniendo en práctica protocolos de choque. «Hemos designado un responsable de comunicación con los trabajadores, encargado de atender las dudas y ayudarles respecto a la gripe -detalla Juanjo Litrán, director de Relaciones Corporativas y gerente de la Fundación Coca Cola España-; además, en cada sección hay una persona de contacto y hemos creado un comité ejecutivo que implica a los departamentos de Calidad y Riesgos laborales, Financiero y Relaciones Corporativas».

«Además -prosigue- se ha llevado una campaña de información individualizada a cada empleado». Litrán añade que el absentismo laboral así como la picaresca no tienen cabida en una empresa como Coca Cola España. «Existe mucha flexibilidad respecto a las ausencias por enfermedad, favorecemos el teletrabajo y perseguimos el espíritu que nos lleva a ver a nuestro personal como el valor más grande a defender».

Aunque desde la CEOE (Confederación Española de Organizaciones Empresariales) prefieren limitarse a las recomendaciones del Gobierno en materia de prevención ante la gripe, la Confederación de Empresarios de Castilla y León (Cecale) pondrá en marcha un plan específico de actuación para hacer frente a la gripe A, «con el objetivo de reforzar la protección de la salud de los trabajadores y minimizar los efectos económicos y sociales de la pandemia», detallan desde Cecale.