Alejo Sauras: «Cuando me ofrecieron el papel de ‘Edipo’ me dije, te hiciste actor por estos retos»

Para Sauras es igual de emocionante ponerse frente a una cámara que subirse a un escenario, «lo importante es conmover al público», cuenta. Ahora el Teatro Español es su segunda casa donde protagoniza ‘Edipo, a través de las llamas’ , uno de los papeles más complejos a los que se ha enfrentado y que le han hecho actuar también este verano en el Teatro romano de Mérida. Hasta fin de mes podrá verse en la capital y con motivo de dicho proyecto hemos hablado con él sobre su carrera, pero también sobre moda, belleza y algún que otro vicio confesado…

Edipo sin duda es un personaje complejo… ¿Has sentido vértigo antes de lanzarte a este proyecto?

¡Claro! Me pilló cuando acababa de terminar de rodar la cuarta temporada de ‘Estoy vivo’, llegaba el buen tiempo, y como no había nada inmediato pues estaba en ese proceso de relajarme y tomármelo con calma para retomar después del verano. Pero de repente me llaman y me ofrecen «Edipo», primero para representarlo en Mérida y luego en el Teatro Español. Total, lo primero que sentí fue un vértigo terrible. Luego me mandaron el texto de Paco Becerra y cuando terminé de leerlo lo primero que se me pasó por la cabeza fue «Alejo, si no haces esto, no eres actor. Te hiciste actor para aceptar este tipo de retos».

Entre la televisión, el cine y el teatro, ¿con qué te quedas?

Hay una cosa que he tenido clara desde el primer día que empecé en esta carrera, y es que no distingo entre formatos, me quedo con todo. Cuando me llega un proyecto lo leo y veo cómo es. Me da lo mismo que se desarrolle en un cine, una pantalla de televisión o en un teatro. Creo que lo importante es contar historias que merezcan la pena, interpretar personajes que te puedan aportar como actor, que puedan conmover al público y moverle algo por dentro. En mi caso cada una me aporta cosas diferentes pero todas ellas son buenas.

Durante la pandemia seguiste trabajando mientras rodabas ‘Estoy vivo’. ¿Cómo era hacerlo en esa época?

El proceso fue duro. Por un lado, por las medidas de seguridad que teníamos que tomar todos, él hecho de tener que guardar las distancias con un equipo con el que llevas cuatro años trabajando y estás acostumbrado a abrazarte y de repente tenías que mantener la distancia.

Por otra parte, teníamos que ser conscientes de lo que estábamos contando ya que estábamos haciendo una comedia de ciencia ficción e intentábamos quitarle peso a la muerte y muchas veces eso se enfoca desde el punto de vista de la comedia. No podíamos ser ajenos al momento que estábamos viviendo, en el que absolutamente todos hemos perdido a gente. Los productores decidieron evitar un poco más de lo normal el drama e intentar que los capítulos dejasen en el espectador un poso agradable, por eso tiró algo más hacia la comedia.

Lo peor y lo mejor de la vida de un actor

Lo mejor es lo que ocurre desde que dicen «acción» hasta que dicen «corten». En un teatro lo mejor es la función y lo peor puede ser el proceso de creación. Sin duda si yo tuviera que elegir el mejor momento, sería cuando termina la función, el teatro está lleno y se levanta a aplaudir. No hay un momento mejor para mí, terminar una función en la que te has dejado el corazón en el escenario y que el público lo haya recibido y te lo transmita, es una sensación que no se puede explicar con palabras. Cada vez que me sucede no puedo evitar que se me salten las lágrimas.

En cuanto al momento más duro de mi carrera, sería el único día que abandoné el set de rodaje porque mi hermana estaba muy enferma. También tengo que decir que hay días duros en los que has estado preparando una prueba con ilusión y luego el proyecto no sale, pero para eso estamos preparados psicológicamente.

¿Hay algo que cambiarías de tu trayectoria profesional?

Los errores también hay que cometerlos, yo creo que una persona que no ha cometido ningún error vive con incertidumbre y miedo siempre. Hay que pisar el barro para conocerlo y saber que es. Yo no cambiaría nada de lo que he hecho, obviamente hay proyectos en los que no me han seleccionado que me hubiese gustado poder hacerlos, pero igual que presumo de no haber faltado ningún día a trabajar, creo que lo que he hecho ha sido poniendo siempre el corazón y todo mi conocimiento de ese momento.

Si no hubieses sido actor, ¿a qué te hubieses dedicado?

Yo de pequeño quería ser piloto o actor, pero tenía hipermetropía, que en ese momento no se podía operar, y no pude. Me alegro de no haber podido serlo porque la idea que tenía de piloto no coincidía con la realidad de un piloto. Afortunadamente cogí esta segunda opción, la de actor, y ha sido mucho mejor de lo que jamás hubiese imaginado. De hecho, a día de hoy, por placer y por hobby soy piloto, hace unos años me saqué la licencia de vuelo y de vez en cuando me doy un paseo, que en realidad es lo que quería.

¿Tienes algún ritual antes de salir al escenario?

No tengo uno propiamente dicho, pero antes suelo poner una playlist que me ayude a entrar en el estado con el que el personaje tiene que salir a escena y empleo los últimos minutos en concentrarme y en que mi cuerpo y mi voz se calienten para estar listo y salir lleno de fuerza.

Tus básicos de otoño

Suelo apostar mucho por la comodidad. Me gusta mucho la americana casual con una camiseta básica debajo blanca o negra, creo que viste mucho y me encanta.

La tendencia a la que nunca sucumbirías

Las camisetas de tirantes apretadas no van nada conmigo, y mira que me gusta la ropa ceñida en su justa medida, pero esa prenda no. Me cuesta mucho también llevar chaquetas que pesen.

Tu rutina de belleza consiste en…

La piel hay que cuidarla e hidratarla siempre. Acostarme con la piel limpia es imprescindible, es algo que hago todos los días religiosamente.

Tu tipo de entrenamiento favorito

Tengo mucha tendencia a adelgazar por lo que tengo que hacer bastantes pesas porque el aeróbico hace que me quede demasiado delgado.

Tu referente en el mundo de la interpretación y en el mundo de la moda

En el mundo de la interpretación es Maribel Verdú, la admiro una barbaridad. Una de mis metas en la profesión es trabajar con ella. En moda me encanta García Madrid, me parece que hacen unos diseños maravillosos con unos tejidos fantásticos. Me siento muy cómodo con sus trajes.

Tu plan estrella

Depende un poco de cómo ha ido la semana, porque si ha sido una semana intensa mi plan favorito es irme a pasear con mi perra. Si me apetece un poco de marcha irme a un pantano me parece un plan divertidísimo, y si me veo con fuerzas me subo a Asturias, uno de mis lugares favoritos en el mundo.

¿Playa o montaña?

Me encantan las dos, me puedo ir un día a Asturias y al siguiente bajarme a Cádiz. En España tenemos los mejores paisajes del mundo.

Si quisieses desaparecer… ¿dónde te encontraríamos?

Seguramente me tendrías que buscar por el norte.

El capricho más caro que te has dado

Un Rolex, cuando terminé Los Serrano después de seis años. Para mí supone un premio a uno de los proyectos más bonitos de mi vida.

Por último… ¿qué es el lujo para ti?

Para mí el lujo es hacer lo que te dé la gana, sin importar el tiempo ni el dinero.