Así se están secando los embalses españoles

Hace tan solo un año, la reserva hídrica estaba en el 46,8%, casi ocho puntos más. La media de la última década para esta semana del año es del 58,3%, casi veinte puntos más que el nivel actual. Hay que remontarse hasta 1995 para encontrar unos datos más alarmantes. Entonces, arrastrado por la larga sequía de principios de los años noventa, los embalses estaban a principios de agosto al 31%, y continuaron cayendo hasta tocar fondo a principios de noviembre en el 23%.

El embalse con mayor capacidad de España, La Serena, en la cuenca del Guadiana, en la provincia de Badajoz, está al 14% de su capacidad, ligeramente por debajo del nivel del año pasado por estas fechas, aunque mucho menos que hace tan solo un lustro, cuando rondaba el 70%. Otro gran embalse de esta cuenca, el Andévalo, en la provincia de Huelva, ha perdido en un año un tercio de las reservas con las que contaba hasta marcar el 40% actual.

El embalse de Almendra, en la cuenca del Duero, entre las provincias de Salamanca y Zamora, el tercero con mayor capacidad de España, está al 35% de su capacidad, menos de la mitad que hace un año, cuando sus reservas estaban en el 78%. Otro gran embalse de la cuenca del Duero, el de Cernadilla, en Zamora, está en apenas el 11% de su capacidad, cuando hace un año estaba a la mitad.

El embalse de Gabriel y Galán, el segundo con mayor capacidad de la cuenca del Tajo, en la provincia de Cáceres, ha perdido la mitad de sus reservas en apenas un año, hasta quedarse de momento en el 26%. El embalse de Iznájar, entre las provincias de Córdoba, Granada y Málaga, el mayor de la cuenca del Guadalquivir, está al 21%.

El segundo mayor embalse de la cuenca del Ebro, Canelles, entre las provincias de Huesca y Lérida, ha perdido la mitad de las reservas que tenía hace un año. Actualmente está por debajo del 40%, cuando en la misma semana del año pasado rozaba el 80%. Más dramática aún es la situación del embalse de Rialb, en la provincia de Lérida, otra de las grandes reservas de la cuenca. Ahora está por debajo del 20% de su capacidad, cuando hace un año rondaba el 60%.

El año hidrológico ha sido muy seco. Según datos de la Agencia Estatal de Meteorología, de octubre a julio han caído 419 litros por metro cuadrado, el cuarto con menos lluvias de la serie histórica. La falta de agua ha ocasionado ya restricciones en algunos municipios de Andalucía, Castilla y León, Galicia y Cataluña.

Por comunidades autónomas, Andalucía es la más afectada. Sus embalses están al 28,4% de su capacidad, según el portal Embalses.net. En Extremadura, Murcia y Castilla-La Mancha están por debajo del 35%. Castilla y León, Navarra y Cataluña, por debajo del 50%.

Por cuencas hidrográficas, las más afectadas son la del Guadalquivir (al 24,2% de su capacidad), Guadiana (25,8%), Guadalete-Barbate (27,1%), Segura (39,9%) y Tajo (40,5%). Las cuencas del Tajo, el Guadiana y el Guadalquivir son las reservas hídricas con mayor capacidad de España. Si estuvieran llenas, abarcarían la mitad del agua embalsada del país. La cuenca del Duero, la otra gran reserva, está actualmente al 42,2%.