El Papa sigue estable y no ha necesitado ventilación mecánica

Además, esta mañana «el Santo Padre ha participado en la Santa Misa, junto a quienes en estos días de hospitalización cuidan de él, alternando así el descanso con la oración», explica el portavoz del Vaticano.

Ya en el parte médico de ayer, los médicos mostraban moderado optimismo pues no se habían repetido las crisis respiratorias, no tenía fiebre y los análisis de sangre no indicaban infecciones en curso. El tono este domingo se mantiene igual.

Los médicos aseguraron el viernes que necesitaban al menos 48 horas para evaluar las consecuencias de la última crisis respiratoria, un broncoespasmo que requirió la aspiración de los jugos gástricos que habían entrado en los pulmones. Quizá este lunes puedan ofrecer nuevos datos, pero el hecho de que no haya síntomas de infección es una buena señal.

Esta mañana el Papa había recibido la visita de los dos cargos más altos del Vaticano, el secretario de Estado Pietro Parolin y el sustituto de la Secretaría de Estado, Edgar Peña Parra. Aunque el Vaticano no ha aclarado la duración del encuentro, probablemente significa que Francisco tenía esta mañana fuerzas suficientes para mantener esa reunión.

Además, el Papa ha publicado esta mañana el texto que había preparado para el ángelus de esta mañana, en el que agradece las oraciones de «fieles de muchas partes del mundo». «Siento todo vuestro cariño y vuestra cercanía y, en este momento particular, me siento como «llevado» y sostenido por todo el Pueblo de Dios. ¡Gracias a todos!», ha escrito.

Es el tercer domingo consecutivo que el Papa no ha podido aparecer en público para el rezo del ángelus. Se está tomando esta situación con paciencia, pues ha asegurado que la vive con agradecimiento a Dios «porque me da la oportunidad de compartir en el cuerpo y en el espíritu la condición de tantos enfermos y personas que sufren».