Un cachorro de labrador muere al pasar casi cinco horas en la bodega de un autobús

Según informan medios locales, el dueño del pequeño animal no contaba con dinero suficiente para pagar el billete de su mascota, a lo que el conductor comentó al pasajero que podía llevar a Estándar, como se llamaba el perro, en la bodega del autobús sin ningún coste. Tal como afirma el dueño, el conductor del bus le aseguró que al cachorro no le pasaría nada porque tenía sitio suficiente para pasar las cuatro horas y media de viaje.

Ante esta afirmación, el hombre hizo caso al conductor y colocó a su compañero peludo en la bodega del vehículo. Durante el viaje se realizó una parada de descanso en la que el dueño del perro udo comprobar que estaba bien y continuar con el largo viaje. Por causas que no se han detallado pero que se están investigando, en esta parada no bajaron al animal para que descansase, aunque seguía con vida.

Al llegar al destino del viaje, Caucasia, fue cuando se descubrió el triste desenlace: Estándar estaba inconsciente cuando fueron a bajarlo de la bodega del autobús. Trataron de reanimar al animal pero no hubo éxito, y falleció una vez el viaje había concluido sin que, ni el dueño ni los allí presentes, pudieran hacer nada más por él.

La empresa de la compañía del autobús en el que viajan el perro y su dueño lanzó un comunicado al conocer el fallecimiento del animal: «El perro llegó a Caucasia y se bajó del bus con vida. Al parecer, un ataque de calor o una asfixia le provocó la muerte, en un hecho que lamentamos como empresa», han tratado de esclarecer. Por el momento se sigue investigando cuál fue la muerte real del cachorro de labrador, así como dónde y cuándo perdió la vida realmente.