Estudiantes piden una prueba única de selectividad : «No es normal el nivel de desigualdad entre comunidades»

Mencía Jimeno, estudiante en Valladolid que ha realizado la EBAU el pasado junio, denuncia: «No es normal el nivel de desigualdad en el nivel de dificultad que hay entre los exámenes de las diferentes comunidades autónomas, en Castilla y León o Madrid es mucho más difícil que en Andalucía o Canarias». Mencía explica que no solo el contenido es diferente si no que también lo es el formato: «Aquí en el examen de historia no nos piden rellenar textos, nos piden desarrollar estándares«. La estudiante cuenta que muy poca gente de su entorno ha podido entrar en la carrera que quería y dónde quería.

Pedro García, estudiante de la Universidad de Valladolid, dirige su opinión a la afirmación de que: «la equidad significa que todos los estudiantes deben tener las mismas posibilidades». Narra la situación por la que tuvo que pasar una amiga suya del colegio que, con un expediente ejemplar, no entró en la Facultad de Medicina de su propia ciudad por que se vio detrás de personas de otras comunidades autónomas que se habían examinado de una selectividad más sencilla y habían superado su nota.

En el otro extremo Antonio Ortega que realizó la EBAU en Canarias en 2019 y ahora estudia en la Universidad Complutense de Madrid tiene su postura clara al respecto: «Si se pide un examen igual para todo el mundo el sistema educativo debería ser el mismo en todo el país«. Desde este punto de vista explica el por qué de esta diferencia entre comunidades: »Uno de los motivos por los que la educación se transfiere a las comunidades autónomas es para que puedan adaptarla a su territorio«.

Antonio defiende que en territorios como Andalucía o Canarias la pobreza es más grande, hay más problemas sociales y es más difícil que el alumnado pueda acceder a facilidades como son las bibliotecas públicas o el acceso a internet. Declara que: «Si la forma de hacer el examen es más sencilla se iguala. No cambia el contenido que estudiamos cambia el formato».

Leire Pérez, de Baleares, afirma que es cierto que existe una diferencia notable entre el nivel de la selectividad pero defiende que: «Tampoco es justo, y se nota mucho a la hora de estudiar, que algunas comunidades tengamos un examen más. Al estudiar catalán o valenciano estamos estudiando el doble de literatura y el doble de historia, y eso no se habla casi nunca«