Alex Batty regresa al Reino Unido tras 6 años desaparecido

La búsqueda de Alex inició oficialmente hace seis años, cuando tenía 11, y fue presuntamente secuestrado por su madre, Melanie Batty, mientras estaba bajo la tutela legal de su abuela, Susan Caruana. Durante este tiempo, madre e hijo llevaron una vida nómada en una «comunidad espiritual», alejados de la vida convencional.

La historia de Alex tomó un giro inesperado esta semana cuando huyó de la comuna a través de un periplo de varios días y noches caminando, hasta que un repartidor lo encontró a un lado de una carretera rural en el suroeste de Francia. No obstante, este sábado se conoció que, el mes pasado, Alex intentó inscribirse en una escuela en el pueblo de Quillan, Francia. Al no poder entregar el menor sus documentos de identidad, los profesores contactaron a la policía, pero la falta de colaboración efectiva entre las autoridades francesas e inglesas impidió que fuera identificado como el menor desaparecido en España en el 2017. Con su cumpleaños número 18 acercándose en marzo, Alex se encontraba sin pasaporte, dirección permanente o calificaciones formales debido a su estilo de vida itinerante. Ante la perspectiva de que su madre lo llevara a Finlandia, decidió dar un paso al frente y abandonar el lugar donde estaba con ella.

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Desde su aparición, el joven han permanecido bajo el cuidado de los servicios sociales franceses, mientras las autoridades intentan localizar a su madre, quien estaba con su ya difunto abuelo, David Batty.

Desde su hogar en Oldham, Susan Caruana expresó su asombro y alegría ante el inminente reencuentro con su nieto. «Es increíble. Es una historia increíble», dijo. «Estoy ansiosa por verlo durante el fin de semana, pero no sé qué está pasando. Estoy esperando a que las autoridades me informen. Ha estado en todas las noticias. Es impresionante, y estoy feliz. Simplemente no puedo creerlo», aseguró, y añadió que «fue como un sueño cuando escuché su voz».

Alex fue visto caminando bajo una lluvia torrencial cerca de Toulouse, a las 3 de la mañana del pasado miércoles, por el repartidor Fabien Accidini, de 26 años, quien le ofreció que subiera a su camión. El joven de 17 años le dijo que había sido «secuestrado» por su madre y que había estado viviendo en las estribaciones de los Pirineos franceses, antes de decidir escapar cuando su madre anunció que planeaba mudarse a Finlandia. El primo del menor, Stephen Devine, aseguró a la prensa británica que «la madre de Alex estaba involucrada en una secta» por lo que «su abuela se convirtió en su tutora (legal) pero luego su madre y su abuelo se ofrecieron a llevarlo de vacaciones durante una semana y nunca más los volvieron a ver. Va a ser un gran ajuste para él. Probablemente creció sin una educación formal». También habló su tía, Raisa Devine, de 72 años, quien afirmó que el niño »estaba muy adaptado» a la vida «con su abuela, y ella quedó devastada cuando él desapareció».

En un comunicado emitido el viernes por la noche a través de la policía de Greater Manchester, Caruana apuntó, emocionada, que «no puedo comenzar a expresar mi alivio y felicidad de que Alex haya sido encontrado sano y salvo». «Hablé con él anoche y fue muy bueno escuchar su voz y ver su rostro nuevamente. No puedo esperar a verlo. Lo principal es que está a salvo, después de lo que sería una experiencia abrumadora para cualquiera», declaró.

El subjefe de policía Chris Sykes, señalo por su parte el viernes que «nuestra principal prioridad ahora es que Alex regrese a casa con su familia en el Reino Unido».