Ana Mato: «dar la tarjeta solo con empadronarse ha costado mil millones»

La ministra ha insistido en que el Gobierno no ha retirado la asistencia sanitaria a nadie y ha pedido no confundir «bajo ningún concepto» el derecho a la atención sanitaria con el derecho a la tarjeta. Mato ha precisado que la reforma sanitaria sitúa a España en el mismo nivel de Europa, donde en ningún país se da cobertura total a personas de otra nacionalidad solo con el empadronamiento.

La titular de Sanidad ha explicado que el cruce de datos ha permitido detectar irregularidades como, por ejemplo, 800.000 tarjetas que constaban como beneficiarios cuando tenían que ser titulares y, de ellos, 200.000 eran beneficiarios de pensionistas y 552.000 personas sin recursos que sí los tenían.

Mato ha pedido a la diputada que no se escude en los profesionales, ya que cientos de ellos «han dado su opinión en la línea de homologar a España con los países de su entorno» . La diputada, por su parte, ha calificado de «insolidario, insensible, injusto e ineficaz» el decreto de reforma sanitaria, con el que se inicia el «desmantelamiento irreversible de un sistema que ha sido el mejor, universal y gratuito, igualitario y solidario».

En respuesta a otra pregunta del también diputado socialista José Martínez Olmos, la ministra ha rechazado que su Gobierno esté planteando introducir el copago sanitario para prestaciones que afectan a la salud. No obstante, Mato ha asegurado que se está trabajando «con intensidad» en la elaboración de una cartera de servicios para que todos los españoles tengan los mismos derechos sanitarios con independencia de donde vivan, en colaboración con las comunidades autónomas y con las sociedades científicas, a través de la Agencia de Evaluación de Tecnologías Sanitarias.

A este respecto, la ministra ha adelantado en los pasillos del Congreso que espera tener lista una primera propuesta el próximo mes de noviembre. Ha reprochado a Olmos que realice anuncios inventados sobre decisiones que el Gobierno no tiene previsto adoptar y le ha pedido prudencia para no alarmar a los ciudadanos «en algo tan importante como es su salud».

Ha resaltado que las medidas incluidas en la reforma sanitaria han ahorrado 221 millones de euros, a los que se suman 37 millones por la compra centralizada de vacunas. Martínez Olmos le ha preguntado a la ministra si los ciudadanos «tendrán que echar mano de su cartera de dinero para pagar la nueva cartera sanitaria».

El diputado ha trasladado la preocupación de las mujeres ante la posibilidad de que mamografías, pruebas genéticas o de reproducción asistida no sean gratuitas, así como de muchos pacientes por si tienen que pagar la rehabilitación o las técnicas oftalmológicas. «Observar cómo usted se plantea revisar la cartera de servicios es para echarse a temblar», ha dicho el diputado.