El autobús de Hazteoir vuelve a la calle para protestar contra la Ley LGTB

A las doce de la mañana el autobús pasó frente a la Cámara Baja y aparcó en la Plaza de Neptuno. Desde su interior descendieron un grupo de miembros de la organización con la cabeza tapada y un mono color naranja, como los presos de Guantánamo y, con las manos encadenadas, recorrieron el trayecto entre la Plaza de Neptuno y las inmediaciones del Congreso. De cada uno de ellos colgaba un cartel denunciando diferentes aspectos de la Ley.

Este es el principio de una campaña que se prolongará durante los meses que dure la tramitación de la ley, en la que se distribuirán cincuenta mil dípticos en los que se recogen los siete puntos más perjudiciales del documento de Podemos. Entre ellos que «los ciudaadnos somos culpables de discriminar mientras no demostremos lo contrario», «se recorta la libertad de las personas homosexuales y transexuales», «se podrán clausurar medio de comunicación y asociaciones» o hay que implantar «vestuarios y baños a elegir según el género sentido».

El presidente de este colectivo, Ignacio Arsuaga , afirmó que la iniciativa que hoy puede iniciar su tramitación parlamentaria es «liberticida y totalitaria» , señalando que «introduce a la fuerza la ideología de género en los colegios» y que « aplasta la disidencia por la vía de las multas».

Igualmente, aseguró que «crea una policía del pensamiento único que puede multar hasta con 45.000 euros a cualquier ciudadano, puede cerrar asociaciones y anima a los niños en los colegios a cuestionarse su sexualidad». En este sentido, denunció el hecho de que un menor pueda someterse a una operación de cambio de sexo sin consultar con los padres.

Hazteoir ha valorado el cambio de actitud del PP , que ha pasado de anunciar el sí a la toma en consideración a la abstención, como hoy adelanta ABC, pero ha pedido tanto a los populares como a Ciudadanos y PSOE que se opongan a la toma en consideración.