Consejos para un baño seguro

- Untarse crema solar antes de salir de casa. Ponerse protección 30 minutos antes de la exposición al sol es lo más adecuado.

- Repetir la protección. Si se toman baños o se juega con la arena es posible que la crema se desprenda del cuerpo. Por eso, hay que volver a untarla después de estas actividades o, si no se practican, cada dos horas.

- Llevar ropa adecuada y gorra. Para evitar insolaciones o golpes de calor, lo mejor es llevar atuendo fresco y prendas que sirvan para proteger la cabeza del sol: gorros, gorras, sombreros...

- Hidartarse. En el agua también se suda, por lo que el cuerpo pierde agua. No olvides ingerir líquido cada poco tiempo.

- Evitar las principales horas de sol. Las horas consideradas como peores para recibir los impactos de los rayos solares comprenden un abanico que oscila desde las 12h hasta las 16h. Si es posible, hay que evitar el baño o la toma de sol en esta franja horaria.

- Respetar las dos horas de digestión. Después de comer hay que esperar dos horas para poder meterse en el agua o realizar ejercicio.

- Mojarse la nuca y las extremidades antes de comenzar el baño para ir adaptándose a la temperatura.

- No correr en el borde de la piscina. Los resbalones son la principal causa de accidente en las piscinas.

- Respetar las indicaciones del socorrista.

- Si hay varios niños al cuidado, conviene que cada adulto se encargue de uno o varios en particular, evitando así la dispersión de atención que genera el grupo.