«No se pueden esconder bajo la alfombra los conflictos del pasado, pero hoy todos apoyamos al Papa Francisco»

-¿Les ha pillado de sorpresa la elección de este Papa argentino?

-Sorpresa fue la renuncia del Papa Benedicto XVI , eso sí fue inesperado. Luego, unos días antes de iniciarse el Cónclave, ya se hablaba de que el cardenal Bergoglio era uno de las personas que podían tener fuerza dentro del Cónclave. Más que una sorpresa, ha sido una gran alegría y una gran emoción que un sacerdote argentino, que el cardenal Jorge Bergoglio, arzobispo de Buenos Aires, sea el Papa Francisco. Hemos visto estos primeros pasos, que son los que siempre él ha tenido, de sencillez, de humildad... Todos sus gestos indican que estamos ante un gran Papa y que se van a cumplir las expectativas.

-Seguro que usted lo conoce bien. ¿Cómo lo podría describir?

-Sólo he tenido dos encuentros con el cardenal Bergoglio, ya años atrás. Siempre han despertado gran espiritualidad sus palabras. Es un hombre sencillo, de una inteligencia muy grande, notablemente preparado para la función que tiene y con la fuerza para seguir adelante el papado que quedó inconcluso de Ratzinger.

-¿Qué supone su elección para América Latina, y para Argentina?

-Hoy se está viviendo en Argentina como una gran fiesta, un regalo de Dios, una decisión que los argentinos, con todo nuestro orgullo, decimos que es la mejor de las decisiones. En Argentina, en América Latina, hay un fervor por los papas independientemente de su nacionalidad y trayectoria. En general, es un continente que grita «viva el Papa», que acompaña masivamente cualquier visita de un Pontífice. Imagínese ahora, se van a multiplicar las devociones en nuestro país y seguramente esto se verá reflejado en la vida de las iglesias locales.

-Se habla estos días de los choques o diferencias con Kirchner... ¿Eso representa algún problema?

-No, no se pueden esconder debajo de la alfombra los conflictos del pasado, pero hoy vivimos una etapa distinta, todos apoyamos al Papa, le deseamos lo mejor y lo vamos a ayudar en lo que nos corresponde. Vivimos esta etapa con mucha esperanza, que es lo que nuestra sociedad merece y las autoridades de nuestro país quieren estar a la altura, sin generar ninguna controversia. Lo sucedido sucedió, nadie va a decir que no, porque es mentir, pero, en función de la verdad, no podemos ignorar que hay una nueva etapa y que hoy el cardenal Bergoglio, el Papa Francisco, es el jefe de la Iglesia universal. Las claves de la política doméstica argentina, trasladadas acá, me parecen una miopía.

-O sea, que la presidenta apoya plenamente al Papa...

-Así lo ha dicho ella con su comunicado y su mensaje de felicitación al Papa.

- El Papa , a través del Nuncio, pedía que no viniera mucha gente a Roma...

-La demanda de pasajes ha hecho que se desbordaran las agencias. Hay que contenerlo con mucho criterio. Va a estar en junio en la JMJ y seguramente haga la visita a Argentina.