«El nuevo examen práctico de conducir es más completo y justo para el alumno»

El práctico, que antes no tenía una duración determinada, se desarrollará como mínimo en 25 minutos. Solo se interrumpirá antes si se comete una falta eliminatoria que comporte un peligro real y concreto, cuando se produzca una intervención justificada del profesor, o si queda acreditada una manifiesta impericia del aspirante.

Otra de las novedades es que los diez primeros minutos del examen serán de conducción autónoma , sin indicaciones. El examinador dará una única instrucción al comienzo para que el alumno se dirija a un lugar concreto, también puede invitarle a que circule libremente o a que se dirija a un punto pasando por otro. Además, si el futuro conductor no conoce el itinerario p odrá utilizar un GPS . «Con estos 10 minutos de conducción independiente se pretende que el alumno se relaje, que empiece el examen con menos estrés y no esté tan pendiente del examinador», explica a ABC Roberto Ramos, experto en Seguridad Vial de la Confederación Nacional de Autoescuelas (CNAE).

Independientemente de que en esta fase se haya cometido algún fallo, siempre que no sea alguno de los anteriormente citados como eliminatorios, el práctico continuará, mínimo, otros 15 minutos, pero en este caso guiado por el examinador. Los criterios de evaluación serán los mismos, aunque, como novedad, se tendrá en cuenta a lo largo de toda la prueba que la conducción sea eficiente para reducir el consumo de combustible y contaminar menos. «Por ejemplo, utilizando las marchas largas cuando el tráfico lo aconseje y el vehículo no necesite potencia o detener el coche sin reducir la marcha», explica Ramos. Conducir de forma ineficiente supondrá una falta leve .

Una vez finalizada la prueba, el examinador comunicará al aspirante, en presencia únicamente del profesor, el resultado. Tanto si esta suspenso como aprobado, le dará una explicación concisa, que no excederá del minuto y medio o de los dos minutos, sobre la evaluación, pero no entrará en discusión sobre faltas concretas.

Aunque el próximo 21 de enero empezará a aplicarse este nuevo modelo de examen en toda España, ya se estaba poniendo en práctica de modo experimental en algunas jefaturas. «La experiencia ha sido positiva porque el alumno iba mucho más relajado . No ha habido quejas», asegura Ramos. En su opinión, no es más fácil o difícil que el actual, sino «más completo y justo» para el alumno. Aunque reconoce que los aspirantes que vayan sin preparar, «a ver si suena la flauta», lo van a tener «más complicado».

Además del práctico, la Dirección General de Tráfico (DGT) también ha introducido cambios en el examen teórico , ya que ha aumentado la batería de posibles preguntas de 800 a 15.500. Desde la DGT aseguran que los cambios en las pruebas van dirigidos a «mejorar la preparación teórica y práctica de las personas que se van a examinar». «No tienen ningún otro fin», aclaran.