La maravillosa y solidaria idea de una hostelera india al ver personas comiendo en su basura

La idea la tuvo la propietaria del local, Minu Pauline , tras ver cada noche a numerosas personas buscando algo que llevarse a la boca en su contenedor de basura, según podemos leer en el blog Upworthy . «Hay tanta gente tirando comida que todavía está en buen estado, y tanta gente recogiéndola del mismo contenedor...para mí es algo impactante», ha explicado. Por eso decidió hacer algo al respecto y colocar en la calle una especie de 'frigorífico solidario' ; justo a las puertas de su restaurante, llamado Pappadavada y situado en Kochi.

Sus clientes, los vecinos de la zona y la propia empresaria dejan en esta nevera toda la comida que todavía está en condiciones de ser aprovechada. No se trata de comprar alimentos específicamente para ponerlos allí, sino de no desperdiciar aquellos que ya se han adquirido. El único requisito es indicar en qué fecha se ha dejado cada cosa para evitar que algo se estropee. Cualquier persona en situación de necesidad puede coger lo que desee de la nevera sin pedir permiso previamente, porque está abierta 24 horas al día y siete días a la semana.

La iniciativa de Minu Pauline está siendo todo un éxito. Calcula que en su 'frigorífico solidario' se ofrecen entre 200 y 300 raciones de comida por jornada. Lo que se deja allí por la mañana suele consumirse antes de que termine el día. Se cumple así un doble objetivo: no sólo se ayuda a quien más lo precisa, sino que también se hace visible a la importancia de aprovechar nuestros alimentos. Por eso la empresaria decidió que la nevera se llamase 'nanma maram', que significa 'árbol de bondad'. «Si desaprovechas tu propio dinero, malgastas recursos sociales», comenta Pauline.

Por fortuna, este proyecto no es único y también en España se han puesto en marcha varios del mismo tipo. La primera nevera solidaria de nuestro país se colocó en Galdakao (Vizcaya) , gracias al trabajo de una asociación de voluntarios. Poco tiempo después se inauguró una en Murcia; y recientemente ha hecho lo propio la Escuela de Hostelería de Leioa . Comida, conciencia social y solidaridad: en ningún frigorífico tiene cabida tanto 'alimento' como en estos.