Modric vuelve a dirigir al Madrid

Modric contestó con arte: «Sabía que usted vendría al Real Madrid , así que me fui como avanzadilla para adaptarme y jugar mejor para cuando usted llegase». Ellos bromean con este suceso y la respuesta del futbolista.

Lo cierto es que el centrocampista es fijo para el italiano. Un seguro de creatividad cuando está en forma. Ya ha cogido un buen nivel físico. Y se nota. Le hacía falta. El técnico esperaba su puesta a punto. Ahora, el director ofensivo madridista ya da un promedio de 68 centros en 90 minutos, de los que 60 son buenos.

Luka lo ha jugado todo esta temporada, excepto el partido de descanso que el italiano le dio frente al Elche. Solo ha marcado siete goles en el Madrid porque «prefiero dar pases a disparar». Carletto quiere que use su buen «chut» a puerta. «Debe disparar más porque sorprende. Los defensas piensan en marcar a Ronaldo y Bale, no en taparle a él».

El entrenador está contento con el salto adelante físico de Luka. Siempre tarda en coger el ritmo. Era necesario para que el preparador terminara de conjuntar el fútbol del Real Madrid . El croata aún no había adquirido la plena forma hace tres semanas y esta temporada se ha encontrado con dos nuevos compañeros en el centro del campo, Kroos y James. El responsable de la plantilla ansiaba la plenitud de Modric para conseguir la adaptación total del alemán y del colombiano al esquema ofensivo dirigido desde 2012 por un futbolista de clase que necesita la protección de un pivote para subir al ataque sin mirar atrás. Xabi le protegía antes. Ahora, Kroos ya ejecuta esa labor. Y el «Rubio» ha vuelto a mandar en el juego.

Su golazo en Villarreal abrió el camino de una victoria complicada frente a un buen rival. Lo mejor fue su retorno a la dirección del ataque. Toques, paredes y pases que agradecieron Bale, CR7 y Benzema. El constructor ha regresado.

El técnico le pidió que se pusiera físicamente a tope para reaccionar cuanto antes tras el vaivén sufrido en San Sebastián. Lo ha hecho. Está fino. El resultado es que el conjunto ha vuelto a carburar al máximo. Faltaba la distinción de Luka para reconocer de nuevo el estilo del cuadro blanco. Sus pases definen la estrategia atacante.

Kroos es su escudero. Durante los primeros partidos de la temporada parecía que Toni le pisaba el terreno. Ahora, el alemán ya juega más retrasado, para dar salida al balón, y su primer enlace es el croata. En El Madrigal firmó el primer tanto del encuentro con un trallazo desde fuera del área. Carlo le recordó inmediatamente una frase que el futbolista conoce: «¿Ves?, tienes que tirar más a puerta». El preparador opina que, si disparara más veces, obtendría una decena de goles por campaña. Aportaría otra solución ante los cerrojos que el Madrid soporta habitualmente. En Villarreal fue la solución perfecta en un momento difícil, cuando mejor aguantaban los locales.

Modric afirma que prefiere dar buenos pases a disparar. Mira delante, ve a Cristiano, Bale y Benzema y piensa que hay artillería para triunfar sin tener que arriesgar a realizar un tiro lejano. Por eso solo ha anotado siete goles desde que fichó en julio de 2012.

Ancelotti ensalza otra virtud del mediocampista, nada fácil de encontrar: «Su regate. Rompe la línea de medios del adversario». Y abre las opciones rematadoras del tridente. Es un arma que Luka sí exhibe cuando el juego se atasca y requiere talento extra.

Es indiscutible en el sistema de «Carletto». Ha disputado todos los partidos excepto el jugado frente al Elche, cuando el entrenador dio descanso a varios titulares. Es titular porque todo el fútbol blanco pasa por su bota derecha, de seda, y no pierde un balón, posee visión de juego y lanza diagonales decisivas.

Necesita defender mejor. Es su asignatura pendiente. El nuevo esquema, con James y Kroos, exige presionar más a todos los centrocampistas. No se puede hacer todo bien. Pero Carlo lo exige.