Mayte Martín: «No me gusta aflamencar los géneros musicales que investigo, sino bucear en cada uno de estos»

El disco salió a la venta el pasado 8 de marzo y, como define la propia artista, se trata de «una colección de canciones icónicas que siempre hemos escuchado y que se nos han quedado ahí», comenta la artista. En este álbum hay, pues, clásicos como 'Gracias a la vida', 'Ne me quitte pas', 'Te recuerdo Amanda', 'Lucía', 'Alfonsina y el mar' y 'El breve espacio en que no está', entre otras. Como dice la cantaora, «son temas que se han elegido solos. Lo más bonito es que cada una de esas doce canciones son un micromundo. Por eso vamos de la copla a la bossa, y de ahí a otros estilos muy distintos».

En el concierto que ofrecerá en el Maestranza este jueves estará acompañada por Nelsa Baró (piano y arreglos), Guillermo Prats (contrabajo) y Vicens Soler (batería). «Son mis compañeros de siempre. Llevamos veintitantos años trabajando juntos. Ha sido importante trabajar cómoda y hacerlo en un ambiente familiar. Son prácticamente mi familia», asegura Mayte Martín.

Reconoce la artista catalana sobre este nuevo trabajo que «quizás lo que más sorprenda de este disco es que yo siempre he hecho álbumes de un solo género en concreto, ya sea de bolero, flamenco, de cantautora, etc., pero en este caso es un disco en donde conviven un montón de géneros como la copla, la bossa y la canción de autor. No me gusta aflamencar cada género, sino que buceo en cada uno de esos géneros. Mi manera de funcionar es que cuando abordo un género me sumerjo en él. Un género es más que un repertorio».

Entre todos los temas hay uno, 'Ne me quitte pas', del que Luis Eduardo Aute decía que era la mejor canción de amor de toda la historia junto a 'Yesterday' de los Beatles. Sobre esta cuestión, Martín dice que «'Ne me quitte pas' es para mí la canción de amor más bella jamás escrita. Es de amor y de desamor. El mensaje está implícito en la música. Yo descubrí esa canción cuando era una niña».

Respecto a su participación en la Bienal de Flamenco de 2022, Mayte Martín dice que «fue un concierto muy emotivo para mí. Tengo un recuerdo precioso de esa noche. No participaba desde hacía cinco o seis ediciones. La última vez debió de ser en 2000 en 2002 y fue fantástico reencontrarse esa noche con el público sevillano». La actuación fue en el Teatro Lope de Vega y la artista logró el respeto del público con un recital que fue especialmente aplaudido.

Respecto a su concierto de esta semana en Sevilla, la cantaora dice que está muy expectante, ya que desea presentar su nuevo trabajo al público sevillano. «Nunca grabo una cosa que no pueda defender en directo. Suelo grabar con la misma gente con la que luego voy a los directos. En esta gira estamos incluyendo tres o cuatro canciones más de otros discos». Asimismo, dice que «antes de grabar un disco tengo que haberlo rodado. No grabo un disco y luego hago conciertos. Cuando me meto en el estudio he cantado antes las canciones en otros conciertos. El de 'Tatuajes' es un repertorio madurado por mí. Los temas tienen que madurar. Hemos hecho siete u ocho conciertos con estas canciones. A la gente le encantan estas canciones y las aman. Se emocionan porque oyen algo que forma parte de sus vidas».

Otro plus para esta artista es regresar al Teatro de la Maestranza, un coliseo donde actuó hace tres o cuatro años. «Fue una experiencia muy emotiva. Me gustó la respuesta de la gente. Es un público muy expresivo, por eso siempre me encanta actuar en escenarios de estas características».

Dice Mayte Martín que «llevo toda la vida oyendo todo tipo de música. Aunque escuché primero el flamenco, muy pronto me interesé por otros géneros. Soy una melómana. A mí me gusta la buena música en general. Me encanta el tango, la música clásica, la brasileña, el jazz, etc. Creo que la gente ha comprendido bien que me haya movido del flamenco a otros estilos como el bolero u otra propuesta. Cada vez tengo más a un público que se identifica con todo lo que hago».