'Supervivientes' y el insólito fenómeno de las galas menguantes

Desde tiempos inmemoriales la gala con más chicha de ‘Supervivientes’ se emite los jueves, una noche que albergaba la expulsión, el visionado de las imágenes de la convivencia, los juegos de recompensa y de líder, y para cerrar, las nominaciones. Con las tres galas semanales (la principal, ‘Conexión Honduras' los domingos’ y ‘Tierra de Nadie’ los martes), más los ‘Última Hora’ , Telecinco ha optado por guardarse contenido para poder alimentar tantas horas del 'reality'.

En realidad, la decisión que dejó descolocados por completo a los seguidores de ‘Supervivientes’ la tomó la cadena a mediados de mayo al recortar la gala del jueves, suprimiendo las nominaciones y pasándolas al ‘prime time’ del viernes. Aun más sinsentido es el hecho de que el trozo de programa que falta es contenido recortado de la entrega de los jueves, pero emitiéndose en diferido (con las consiguientes filtraciones) un día después. El trasfondo de esta estrategia tan cuestionada no es otro que el de competir con el final de ‘El Desafío’ y la nueva edición de ‘La Voz Kids’ en Antena 3.

En este nuevo capítulo de la interminable guerra de audiencia, ‘Supervivientes’ ha perdido los tres asaltos, aunque quizás la subida de 1, 7 puntos de la última semana haya dado alas a la cadena para alargar todavía más la gala exprés de los viernes en detrimento de la principal. Y es que este jueves 9 de mayo la cadena recortó la octava entrega de ‘Supervivientes’ todavía más, finalizándola a las 00.45, un cuarto de hora antes de lo habitual. Demasiado corta y pega para meter todas las publicidades, pitotes, pruebas de recompensa y chascarrillos de Jorge Javier Vázque z.

Tras la unificación de Royales y Fatales, la organización trasladó por fin a todos los concursantes a otra de las míticas localizaciones de los Cayos Cochinos, Playa Uva, que también acoge a partir de ahora el Nuevo Paraíso, un entorno privilegiado reservado a los mejores supervivientes. Disfrutarlo era cuestión de pelearlo en una prueba de en la que debían pescar un chisquero y prender una llama lo más rápido posible. Nacho, Ignacio y Alejandro resultaron los más rápidos completando la hazaña. En contrapunto, los “grandes” supervivientes Kiko Matamoros y Anabel Pantoja, ni lo intentaron.

El nuevo juego de localización consumió más de la mitad de la octava gala, y eso que todavía quedaba por delante un momento tan crucial como conocer la identidad del expulsado. Alejandro , Mariana y Tania continuaban en la cuerda floja una vez salvada la sobrina de Isabel Pantoja en el último 'Tierra de nadie' , con Carlos Sober a . De los tres nominados, la canaria fue la menos votada, y por tanto, la nueva compañera ‘Parásito’ de Marta Peñate.

Su amistad con Anuar , junto al rechazo que últimamente causan las parejas en concursos de telerrealidad, le han costado la permanencia a Tania , que se despidió del grupo dejando un Alejandro completamente abatido. «' Supervivientes’ es una de las cosas que me voy a llevar para siempre en mi vida. He hecho cosas que jamás hubiese imaginado. Hay personas que me han llenado el alma y que me han hecho muy feliz aquí. Estoy muy orgullosa de mí misma, espero que la gente se anime a venir».

Ahora bien, si la audiencia celebraba que echando a Tania se acabarían las carpetas en esta edición, erró completamente el tiro; de hecho, todavía queda en pie una tanto más soporífera. Anabel Pantoja y Yulen Pereira están juntos tras la unificación, pero no revueltos. El deportista quiere ir poco a poco, mientras que la colaboradora de ‘Sálvame’, en sus horas más bajas, aseguraba estar «más enganchada que un anzuelo a un pez».

Como si fuesen espectadores de un culebrón, algunos de los compañeros opinaban sobre la telenovela en ciernes al reunirse en la palapa. A su estilo incisivo, Matamoros fue el que metió el dedo en la yaga hasta el fondo, destacando sobre todo la falta de pasión entre los tortolitos. «Esta relación tiene menos cuerda que el reloj de mi abuela. Van a durar hasta que se acabe el ‘reality’», expresó.

La agraviada zanjó el asunto con un argumento premonitorio. «Si el es más soso y más frío, lo respeto, y punto. Yo no he venido aquí a hacer carantoñas, sino a sobrevivir. Esto no es ‘Titanic’ ». Y tiene toda la razón. Al menos en la película de James Cameron había supervivencia.