Rubiales la saca jugada
«Los órganos de la Federación han determinado que esto es moral, y yo no puedo ir en contra de los órganos de la Federación…»
La polémica de Rubiales , Piqué y la Supercopa saudí ilustra la importancia de los incentivos. La Federación Española de Fútbol era una medianía presupuestaria en el contexto internacional hasta que se les ocurrió ligar el salario del presidente a los ingresos ... recibidos. Pasados unos años, solo Inglaterra la supera. Va como un tiro. Pero esta gestión, a todas luces exitosa, se ve tan amenazada por los audios que Rubiales pasó ayer por las televisiones para anunciar que «está dispuesto a un salario fijo». Abandona el fijo más variables (más de 600.000 euros el año pasado) por el fijo más IPC (que no está mal). 'Rubi' se lo explicó a Ferreras ('el Ferri' en otros audios). La operación es económicamente buena, y legal ya sabemos que es legal, pero Rubiales quiso analizarla desde todos los criterios posibles.
Para empezar, el de la mujer. «Con este contrato, la condición de la mujer saudí no empeora». Esto es una mejora desde el punto de vista de Pareto , economista que estudió la eficiencia en la asignación de los recursos. Con su Supercopa, alguien mejora y nadie empeora. Pero para quien pudiera objetar sobre la mayor o menor equidad, Rubiales aclara: «Yo busco dinero para los que más lo necesitan (el fútbol modesto)». Así que la operación es socialmente buena. Quizás no óptima, pero sí mejor.
Aparece aquí la voz virtuosa del tertuliano: «Esto vulnera todos los estándares éticos». Y Rubiales tiene que explicar que «somos 47 millones de españoles, cada uno con su moral y su ética», algo que conoce porque es lo que se dijo siempre del seleccionador, que todos llevamos uno dentro, razón por la que la RFEF tiene su propio 'comité ético'. «Los órganos de la Federación han determinado que esto es moral, y yo no puedo ir en contra de los órganos de la Federación…». Rubiales se adhiere así a un criterio formalista de modo bastante escrupuloso.
Repasemos, pues: la Supercopa es legal, aumenta el presupuesto, es una mejora paretiana, cumple criterios de igualdad, redistribución y diálogo intercultural, beneficia particularmente a un catalán y es estrictamente formalista. ¿De qué se quejan?
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete