Así nos ha cambiado el 2020 como espectadores

Apenas dos días después, su consumo subió hasta las cinco horas y 16 minutos, según escribió Federico Marín en las páginas de este periódico. Parece mucho, y lo es, ya que supone la mayor cifra desde que se miden las audiencias, pero la media real es mayor y se dispara a más de seis horas y media si solo se contabilizan los espectadores reales.

En 2020 no solo ha aumentado el consumo televisivo, también ha cambiado el contenido al que accedemos. En marzo aumentó el consumo de informativos y contenido infantil, al menos en la televisión en abierto, el único espacio que ofrece datos reales de consumo. Ahora, cuando el año está a punto de terminar, Netflix facilita algunas pinceladas que vislumbran cómo ha cambiado nuestra forma de ver en las plataformas de streaming .

«La isla de las tentaciones» no ha sido el único reality que ha conquistado a la audiencia. El incremento de programas de no ficción ha sido más que notable en España. En 2020, se ha visto más de un 140% más que el año pasado, apostando por títulos con temáticas muy similares el concurso de Telecinco. Alguos ejemplos son «Love is Blind» o «Jugando con Fuego». El suscriptor medio también ha aprendido mucho: ha visto casi el doble de documentales, entre los que destacan «El dilema de las redes» o «Tiger King».

Pero este año sin abrazos también ha propiciado que se vea ficciones románticas. Los romances han sido tendencia y en España han crecido más de un 150% más que en 2019. Han destacado títulos como «Las chicas del cable», «Valeria» o «A todos los chicos. PD: Todavía te quiero». La evasión de la realidad a mundos fantásticos también ha sido clave: se ha visto en nuestro país más de un 140% más historias de fantasía que el año pasado. Destacan historias como «Locke and key», «Carta al Rey» o «Monja guerrera».

Las plataformas de streaming incluso nos han permitido viajar a través de grandes historias. Entre todos los países posibles ha destacado uno: Corea del Sur. Se ha visto casi tres veces más K-dramas que el año pasado con títulos como «Está bien no estar bien» o «My holo love».