¿Dónde ha puesto Audiard las piernas de Marion Cotillard?

La película nace, según Jacques Audiard, de la fusión y confusión de dos novelas cortas de Craig Davidson , y también nace de su afán de alejarse de la anterior, la claustrofóbica «Un profeta» . Ahora cuenta algo así como una historia de amor o de necesidades por resolver entre dos personajes unidos por la fatalidad: un hombre que lucha con fiereza por su espacio y que apenas tiene nada salvo un hijo de cinco años al que cuidar, y una mujer que lo tiene todo hasta que un accidente laboral (es una sirena entre las orcas) le cambia la vida. Está filmada esta terrible y tierna historia muy desde dentro, con la luz de la Costa Azul y las sombras del argumento, sin mostrar ni buscar compasiones. Fui muy aplaudida al final y el trabajo de la pareja protagonista, Marion Cotillard y Matthias Schoenaerts , está muy próximo a lo grande.

Con menos recorrido cinematográfico, pero con mucha más pasión, el egipcio Yoursy Nasrallah contaba también una extraña relación paralelamente a los sucesos de la Plaza de Tahir y del ambiente revolucionario de la pasada primavera . La mezcla del material de archivo, manufacturado de cualquier modo entre la agitación y la marabunta, le proporciona mucho frescor a la historia de ficción que se narra y que se mete incluso en esas propias imágenes de archivo de la realidad. El espíritu de libertad, la emancipación de la mujer, la superación de barreras sociales y de clase forman el líquido amniótico en el que chapotea la historia, junto a esa idea de piedras eternas, muros y pirámides que son el fondo visual y simbólico de la película.