Suscríbete a
ABC Premium

Cardo máximo

También ha muerto Andrés

"Tu código postal afecta más que tu código genético frente al cáncer". ¿Y los que carecen también de código postal?

Javier Rubio

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Un ramo de flores envuelto en papel rojo y una sencilla nota escrita a mano sobre un papel cuadriculado como de cuaderno escolar: «Descansa en paz Andrés ya estás en la gloria eterna de Dios». Alguien lo puso a la entrada de la antigua biblioteca ... pública de la calle Alfonso XII, donde Andrés hacía su vida. Hago memoria y recuerdo a alguien en quien normalmente no reparaba, con el transistor encendido o de tertulia con otros compañeros de fatigas. El acceso al edificio público los protegía de la intemperie. Eso y los cartones, las mantas en las que se arrebujaba. No murió solo. Al menos tuvo una mano amiga que lo socorrió cuando cayó desplomado en mitad de la calle. Avisado a deshora, un sacerdote le administró los últimos sacramentos. El martes pasado aplicaron la misa de la tarde en la parroquia de San Vicente por el eterno sufragio de su alma. El templo estaba lleno. Iba camino del médico acompañado por un voluntario del proyecto ‘Levántate y anda’ que cuida de las personas sin techo en el Centro de Sevilla cuando falleció. Una cita con el especialista o algo así en Marqués de Paradas. Nunca llegó a la calle donde la Asociación Española Contra el Cáncer dispone de un local de sensibilización.

Artículo solo para suscriptores

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comparte esta noticia por correo electrónico
Reporta un error en esta noticia