editorial
Hacia un cambio de gobierno
El último barómetro de GAD3 detecta un parón del avance de Feijóo en las encuestas que, aunque insuficiente para las expectativas de triunfo de la izquierda, debe poner en alerta al líder del PP
El nuevo Barómetro de ABC realizado por GAD3 arroja tres conclusiones. La primera es que la derecha de PP y Vox lograría una holgada mayoría absoluta si ahora mismo se celebraran elecciones generales, que en su franja más alta alcanzaría 191 escaños, y en la ... más baja, 185. La segunda, que el PP perdería ocho escaños respecto a la última proyección de julio, cuando la horquilla le situaba entre 155 y 159 escaños frente a los 147-151 de ahora. Esto se traduce en que el 'efecto Feijóo' no se aplaca, pero sí se mitiga, en la medida que se ha corregido a la baja para el PP la euforia que en julio arrastraron los resultados de ese partido en Andalucía, cuando logró mayoría absoluta frente al PSOE. La tercera conclusión es que el PSOE experimenta una leve remontada y pasaría de los 94-98 escaños calculados para julio a 104-108. De un lado, el PSOE se beneficia de la leve bajada del PP y de que Vox parezca ya estancado en la cuarentena de escaños frente a los 52 de que ahora dispone en el Congreso, pero sobre todo se nutre de la caída de Unidas Podemos, en la medida en que el escoramiento del PSOE a la izquierda y el progresivo descrédito del partido de Ione Belarra solo consiguen añadir votos a favor de los socialistas. Eso sí, de manera insuficiente para que la izquierda, con ninguna de las fórmulas en liza, incluidos independentistas y nacionalistas, pueda lograr una nueva mayoría de legislatura.
Este sondeo debe poner sobre alerta a Alberto Núñez Feijóo, ya que desde que fue elegido presidente del PP toda su tendencia demoscópica fue siempre prácticamente al alza, y ahora no solo se modera sino que por primera vez cae en intención de voto. Los esfuerzos tácticos del PSOE por recuperar el terreno perdido con las tres grandes crisis vividas, la pandémica, la energética y la inflacionista –sin que ninguna de las tres esté aún resuelta– están permitiendo a Pedro Sánchez un cierto margen de recuperación (llegó a caer en las previsiones de GAD 3 hasta un mínimo de 94 escaños frente a los 120 que tiene hoy en el Congreso).
Sin embargo, esa recuperación solo puede interpretarse como un movimiento basculante interno en la izquierda porque aunque capitaliza un voto más radicalizado por la deriva de Unidas Podemos, no recupera voto moderado hacia el centro. Además, esta previsión tiene mucho de espejismo en la medida en que el sondeo de ABC no tiene aún en consideración a la plataforma Sumar, el partido que está impulsando Yolanda Díaz al margen de Podemos. En la medida en que aún se desconoce el alcance que pueda tener Sumar, y que en su caso, si llegase a presentarse a las elecciones generales, sería una tercera marca electoral en el ámbito de la izquierda, las alteraciones propias de la Ley D'Hondt dividiendo un mismo espectro ideológico entre tres partidos, podría segmentar aún más la intención de voto perjudicando en escaños a los socialistas. De momento, Sumar es una inmensa especulación, y solo el PSOE capitaliza ese voto. De hecho, Podemos se hundiría hasta entre 14 y 16 escaños frente a los 35 actuales, menos de la mitad que los que ahora tiene, en su peor resultado en toda la serie histórica de GAD3.
En el ámbito del separatismo, la foto fija de su resultado es invariable. Tanto ERC como PNV, Junts, CUP o Bildu mantienen sus actuales resultados. No obstante, y más allá de fluctuaciones puntuales, la tendencia de voto se dirige hacia un cambio de Gobierno, con el retorno de la derecha a La Moncloa.
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