La ayuda a Ucrania no puede caer en las redes del crimen

Editorial ABC

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02/11/2022
Actualizado a las 08:42h.

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La alerta lanzada el pasado verano por Europol, entonces una simple sospecha, ha sido ya confirmada por la Policía de Finlandia: los traficantes de armas aprovechan el caos de la guerra de Ucrania para vender rifles de asalto, granadas y drones en el mercado negro ... de los países europeos, donde las bandas criminales se están reforzando con parte del arsenal que los aliados entregan al Gobierno de Kiev. Como sucedió en la guerra de los Balcanes, epicentro de un tráfico de armas que surtió de material a las mafias continentales, la invasión de Ucrania ha hecho aflorar la peor condición humana, aquella que saca rédito de la tragedia y malversa la ayuda internacional, ya sea humanitaria o militar, hurtada a quienes la necesitan para sobrevivir y utilizada como herramienta del crimen organizado. El mundo libre no solo tiene la obligación moral de auxiliar a Ucrania, sino de establecer los controles necesarios para que su ayuda no se convierta en un bumerán contra las libertades que pretende defender.