2 de julio
La autocracia llama a la puerta
Sánchez no oculta su obsesión por extender ese control sobre los jueces que se resisten a pasar por el aro
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónCada día que pasa se advierte con mayor claridad el grave peligro que nos amenaza. Nos estamos jugando la democracia a manos de un déspota más pendiente de satisfacer sus ambiciones de poder personal que de los valores democráticos. Parece una obviedad que a estas ... alturas se deba recordar que la democracia se sustenta en la separación de poderes efectiva, no nominal, y en esta separación es vital la independencia del poder judicial para garantizar el Estado de derecho. Y Sánchez no oculta su obsesión por extender ese control sobre los jueces que se resisten a pasar por el aro, al punto de verse obligados a convocar una insólita huelga contra la 'ley Bolaños'. Habiendo fracasado en su pretensión de controlar el Judicial, ha puesto su punto de mira en la Fiscalía, en la relajación de los sistemas de acceso a la judicatura y a la Fiscalía misma «para romper la barrera de clases», según el proyecto de ley en trámite.
En su proyecto está dispuesto, como Sansón, a derribar las columnas del templo de la democracia con tal de mantenerse en el poder. Sánchez ha fijado su atención solo en jueces y fiscales, por lo que la 'lucha de clases' no va con el resto de carreras al no amenazar su satrapía. La medida estrella de la estrategia es sustraer a los jueces la instrucción de las causas para residenciarla en la Fiscalía.
Con mi respeto al Ministerio Público, los fiscales no gozan de independencia, como ellos mismos se encargan de advertir, sino que operan jerárquicamente y, en último término, bajo la dependencia del fiscal general del Estado, dependiente este, a su vez, del Gobierno. No hay más que observar sus posiciones en las causas que cercan a Sánchez sin el menor disimulo. Nada se dice de la reforma de la Fiscalía en cuanto a independencia, dotación de medios y un cambio de cultura centrada hasta hora en la jerarquía y la acusación como parte. Pero esto tiene una derivada que es, en realidad, la clave de la cuestión: la muerte de la incómoda UCO, que pasará a depender del fiscal instructor, o sea del fiscal general, o sea de Sánchez. Un chollo para la familia presidencial. Y todo evidente, previsible y notorio ante nuestras narices.
Rafael Caro Ruiz. Palma del Río (Córdoba)
Tuve un sueño
Paseo por las afueras de la ciudad y me topo con un gran edificio. Contemplo su construcción circular. Una gran escultura lo preside: una bella joven con ojos tapados por un paño. Sus manos sostienen una balanza equilibrada y una espada desenvainada en la otra. Reconocí la representación de la Justicia: «Juzgar por igual a todo el que infrinja las leyes sin acepción de personas y aplicar el castigo merecido a todos por igual». Mientras la admiro, una figura siniestra, con la toga embarrada, se acerca a la figura. Mira hacia el no lejano palacio de La Moncloa. Siguiendo las normas que de allí reciben, que a su vez les llegan de Bélgica, inclinan la balanza, retiran el paño de la cara de la bella mujer y tapan la espada. Despierto despavorido. Ojalá fuese solo un sueño.
Prisciliano Castillo. León
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete