Suscribete a
ABC Premium

Carlos Herrera

Y Sánchez despertó

Aparte de los errores que pueda cometer, nada descartables, Sánchez ha acertado en dos nombres

Carlos Herrera

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Era hora de que Sánchez acertase. Un tipo, es sabido, no puede equivocarse todas las horas de todos los días, ni todos los días de todos los años: aunque sea por un fenómeno meramente casual, antes o después tiene que darle a la tecla adecuada. ... Al secretario general de los socialistas le venían afanando la merienda desde hacía bastantes días y muchos nos preguntábamos si este hombre estaba hecho de una horchata especialmente doliente. Cuando no era Pablo Iglesias encarrilando una abigarrada reata de cabras hacia su garaje, era cualquiera de sus barones despreciando con media boca su capacidad de liderazgo así pasase un par de meses; pero cada tarde tenía su afán y parecía que no había de llegar el día en el que el candidato socialista aportase algo más que un lamento o un desdén. Finalmente, Sánchez tomó la iniciativa, esa cosa que en política significa que no te madruguen las ideas y que no tengas que ir a remolque de las ocurrencias de los demás: aparte de los errores que pueda cometer, nada descartables, ha acertado en dos nombres, cosa que no puede decirse de la anterior confección de listas.

Artículo solo para suscriptores

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comparte esta noticia por correo electrónico
Reporta un error en esta noticia