Suscribete a
ABC Premium

Isabel San Sebastián

Esto se acaba

Jaime Mayor diagnostica un mal llamado mentira que infecta la vida pública hasta el descrédito

Isabel San Sebastián

Esta funcionalidad es sólo para registrados

La democracia occidental , tal como la conocemos los de mi generación, está llegando a su fin. Los partidos tradicionales sucumben en las urnas ante el avance del extremismo y la aparición de fuerzas "renovadoras" cuyo máximo capital político, por el momento, es ... la virginidad derivada de la ausencia de oportunidad para robar al contribuyente o traicionar lo prometido, toda vez que su gestión está aún por contrastar. Europa amenaza ruina como proyecto común compartido y muestra una primera amputación dolorosa con la salida del Reino Unido, cuyo repliegue en sí mismo es un fracaso colectivo; de quienes se marchan, sin duda, pero también de una Unión cada vez menos atractiva a fuer de burocratizada. La corrupción , especialmente obscena en los países ribereños del Mediterráneo como el nuestro, causa estragos en la confianza de los electores, que castigan a sus responsables echándose a menudo en brazos del populismo suicida. La amenaza yihadista, unida a las dificultades económicas y a una inmigración descontrolada de difícil o imposible integración, enciende por doquier hogueras ultranacionalistas que proponen levantar fronteras y volver a un proteccionismo estéril, incompatible con el progreso. Estamos viviendo un final de época extraordinariamente inquietante si pensamos en nuestros hijos. El paso del mundo conocido, seguro, nacido a escala global de la Segunda Guerra Mundial y en la España de la Transición, a una nueva realidad cuyos perfiles se nos escapan. Las invasiones bárbaras en versión tercer milenio.

Artículo solo para suscriptores

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comparte esta noticia por correo electrónico
Reporta un error en esta noticia