La profesora de Córdoba acusada de vejaciones: «Jamás me permitiría insultar a un alumno mío»

La profesora se ha enfrentado a todas las preguntas de la Fiscalía y la acusación particular, sin rechazar ninguna . El relato de las acusaciones pone en su boca los siguientes insultos y vejaciones hacia sus alumnos: «Eres más infantil que el mecanismo de un chupete», «eres más tonto que un pavo en Navidad », «estás 'empaná'», «pavo, tonto y torpe» y hasta «gilipolli» (sic). Todas las partes, incluso los alumnos que han testificado hoy, han negado que la profesora empleara en algún momento la violencia física, solo verbal. Los supuestos hechos ocurrieron en el curso 2014-2015 , cuando los denunciantes tenían 13 años de edad.

Para María del Carmen F. N., todo se reduce a una «animadversión» hacia ella por parte de los familiares de algunos de los alumnos que han denunciado. Durante el juicio, la acusada recordó que el conflicto se precipitó en febrero de 2014, cuando descubrió que dos alumnas habían redactado una nota vejatoria hacia una profesora del centro. Aquella broma les costó a las alumnas una semana de expulsión del centro educativo, sanción aprobada por la Comisión de Convivencia del IES Cecilio Jiménez, del que por entonces la acusada era la directora.

Otro de los conflictos se limitó a una advertencia oral . La profesora, que daba Francés, aseguró que cinco de los 12 alumnos de la misma clase se pusieron de acuerdo para no hacer las tareas . María del Carmen F. N. recordó que entonces calificó esa rebelión como «tontería» , pero nada más.

Tras el testimonio de la acusada, declararon dos de los alumnos y sus respectivas madres. «Mi hijo lloraba porque no quería ir al instituto , se metía debajo de la cama y no se relacionaba con nadie», manifestó una de las progenitoras. El motivo era, supuestamente, «que no quería estar en la clase de Francés con ella [la profesora] porque chillaba mucho y no le gustaba». Su hijo, aseguró la madre ante el tribunal, ya había sufrido acoso físico escolar antes de este caso.

El menor, que ahora tiene 17 años y que declaró con una mampara para no ver a la profesora, manifestó que la acusada « nos insultaba y menospreciaba . Me decía caratonto, mentiroso, vago... No todos los días, pero sí gran parte. Eso me afectó» hasta el punto de tener que recibir tratamiento psicológico.

Otra de las alumnas denunciantes, que ha tenido que acudir a varios psicólogos, dijo en el juicio que «la profesora nos insultaba, nos decía que éramos unos inútiles ». A diferencia del otro alumno, esta joven sí sostiene que el maltrato era «todos los días».