Disfrutando de la luz del sol y de la de los flashes de las cámaras. Así de encantado se muestra el ejemplar de cría de foca que en estos momentos extiende su alargado y fusiforme cuerpo sobre las escalinatas de la Ópera de Sídney (Australia).
El animal alterna el calor que experimenta sobre el cemento con las frescas aguas del puerto. Parece «feliz» y «sana», explican a los medios locales los agentes encargados de vigilar a este mamífero marino, que ya había sido avistado por el área desde hacía más de una semana, aunque hasta hoy jueves no se había mostrado tan «osado».
Las autoridades de Australia ya han advertido de que la cría «no está tomando el sol», sino regulando su temperatura corporal, y de que se trata de un hecho «inusual», ya que no se observan con frecuencia ejemplares de la especie -Arctocephalus forsteri o foca de Nueva Zelanda- por la bahía de Sídney.
Desde el Gobierno de Nueva Zelanda también han querido alertar a los curiosos de que es recomendable que se mantengan a 20 metros de distancia de la foca, la cual debe ser tratada con «precaución».
La cría de foca que se «tuesta» sobre las escalinatas de la Ópera de Sídney
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