La Dirección General de Tráfico (DGT) siempre hace especial hincapié en que conducir habiendo bebido alcohol previamente son dos acciones incompatibles y en que «la única tasa realmente segura es 0,0 gramos de etanol por litro de sangre».
No obstante, la ley establece unos ... límites determinados. Como ya explicaba este diario «para conductores de vehículos y bicicletas el máximo permitido es de 0,5 gramos por litro en sangre o de 0,25 miligramos por litro en aire espirado, mientras que para conductores noveles (durante los dos años siguientes a la obtención del permiso) o profesionales (de transporte de viajeros en vehículos de más de nueve plazas, de servicio público, de transporte escolar y de menores, de mercancías peligrosas o de servicio de urgencia) el nivel de exigencia es aún mayor: en estos casos la tasa máxima de alcohol permitida es de 0,3 gramos por litro en sangre y de 0,15 miligramos de alcohol por litro en aire espirado».
Sanciones
Y, pasando al siguiente punto, ¿cuál es la multa por superar las tasas de alcohol permitidas? Asciende a 500 euros y la retirada de cuatro o seis puntos en el carnet de conducir. Sin embargo, si no es la primera vez que el conductor comete este tipo de infracción y ya haya sido penalizado en el año inmediatamente anterior por el mismo motivo, la multa se incrementa: se sitúa en mil euros y la retirada de cuatro o seis puntos en el carnet.
Por otra parte, se sobrepasa aún más la tasa y se llega a «los 1,2 gramos por litro en sangre o los 0,60 miligramos por litro en aire espirado, la sanción corresponde a una pena de tres a seis meses de cárcel además de la prohibición de conducir vehículos a motor y ciclomotores en un periodo de entre uno y cuatro años».
Artículo solo para suscriptores
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete