Las primarias tensionan el PSM

Estas fuentes dan por hecho que Gómez será el candidato a la Presidencia de la Comunidad de Madrid en las primarias del 19 de octubre que hoy aprobará el Comité Federal. Habrá que ver si el veterano exdiputado autonómico César Giner consigue los avales para disputársela y además, resaltan, solo votarán militantes, no simpatizantes, lo cual, llegado el caso, hará más fácil la reelección de Gómez. Ferraz sí cuenta también con que, ese día, el actual portavoz municipal, Jaime Lissavetzky, y Antonio Miguel Carmona, se disputen en primarias la candidatura a la Alcaldía de la capital.

La intromisión de la Ejecutiva Federal, unas veces cierta y otras interesado bulo para descalificar a un competidor, fue habitual en el PSMdesde los tiempos de Felipe González y Alfonso Guerra y hoy es desechada por el «aparato» de Sánchez dado el desastroso precedente de 2010. En el verano de aquel año, José Luis Rodríguez Zapatero llamó a Tomás Gómez a La Moncloa para conminarle a que renunciara a ser candidato a la Comunidad de Madrid, y cuando éste se negó, obligó nada menos que a una ministra, Trinidad Jiménez , a pelear en primarias contra él, pero salió derrotada. En aquel envite, Sánchez, que había sido «mano derecha» de Jiménez en el Ayuntamiento, también perdió, como el propio Zapatero o José Blanco, el gran mentor del hoy líder socialista. Y, según contó un año más tarde el equipo de Alfredo Pérez Rubalcaba, Gómez pasó factura al hoy secretario general, vetando su presencia en un puesto de salida de la lista al Congreso por Madrid en las generales de noviembre de 2011. Sánchez no volvería a la Carrera de San Jerónimo hasta febrero de 2012, cuando Cristina Narbona abandonó su escaño de diputada.

Han pasado dos años de aquella tumultuosa elección de candidatosy ni Zapatero ni Rubalcaba ni Blanco están ya en primera línea. «No tendría sentido», porque «Tomás hoy es Ferraz», resaltan fuentes próximas al líder del PSM, en alusión a su entrada en la Ejecutiva de Sánchez durante el congreso extraordinario de julio y a la buena relación que parece presidir hoy sus relaciones. Todo empezó el 12 de junio en Alcorcón (Madrid). Esa noche, en un sótano de la sede del PSM en la localidad, Sánchez anunciaba a España que comenzaba su carrera para competir con Eduardo Madina por el liderazgo el PSOE... y, pragmático como es, soltó: «Haré todo lo posible para que Tomás Gómez sea el próximo presidente de la Comunidad de Madrid».

La cara del que iba a ser entonces su director de campaña, José Cepeda, enfrentado a Gómez, era un poema; como la de muchos de los presentes. Cepeda no oculta que aspira a hacerse con el liderazgo del PSM, pero Sánchez ha optado por aliarse con «todo» el partido en Madrid y hacer lo que nadie hubiera pronosticado hace tres meses: meter en la Ejecutiva a Gómez para silenciar a la díscola federación.

No se descarta que el salto de Cepeda a la sede de Callao se produzca una vez celebradas las próximas elecciones si los resultados de Gómez no son buenos. Pero eso se verá a partir de mayo.