Conjura para un asesinato
La Audiencia Provincial juzga a los acusados de matar por encargo a un abogado de narcos gallegos y rusos
Conjura para un asesinato
El asesinato a tiros, ante su novia, en el coche y a la entrada de su casa de Chamartín del abogado Alfonso Díaz Moñux, tiene todo los ingredientes para una novela negra. Así se desprende del escrito de calificaciones provisionales de la Fiscalía, al que ... ha tenido acceso ABC ante el inicio de la vista oral en la Audiencia Provincial .
Alfonso Díaz Moñux pereció a las 11.30 de la mañana del 19 de diciembre de 2008, en el Gregorio Marañón. Catorce horas antes, le descerrajaban dos tiros en la cabeza cuando conducía al interior del párking de su vivienda, en la calle de Antonio Rodríguez Villa, 14. Los dos sicarios que le asaltaron desde el exterior de su vehículo con una semiautomática rubricaban con sangre un plan que, a juicio del Ministerio Público, empezó a urdirse meses antes y que no fue más de una de las dos alternativas que el ideólogo puso sobre la mesa.
El abogado Díaz Moñux estaba separado y tenía dos hijas. A sus 45 años, convivía desde hacía tiempo con la controvertida colega Tania Varela Otero, una letrada de Cambados condenada a 7 años de prisión por blanqueo de capitales proveniente de un alijo de drogas de David Pérez Lago, hijastro del capo gallego Laureano Oubiña , del que fue pareja. Es más, una de las líneas de investigación que siguió Homicidios fue si el asesinado había tenido algo que ver en el robo a una partida de cocaína a un cártel colombiano en el que se siguió la pista a Pérez Lago. También, una supuesta revancha por celos, al ser sustituido el hijastro de Oubiña por Díaz Moñux en la vida sentimental de Tania Varela. A juicio de la Fiscalía, a fecha de hoy, la persona que encargó el crimen sigue sin nombre y apellidos.
Alfonso Díaz Moñux había ejercido como abogado en peliagudos pleitos, como la operación Pípol, y también defendió al narco gallego Sito Miñanco, amén de otro ruso. Se le investigó por blanqueo y compartía despacho en la calle de Lagasca con el letrado de la AVT Emilio Murcia.
Según la Fiscalía, Jhony Alexander Echeverri Olmos, colombiano de 33 años, contactó con un compatriota en un billar de Galapagar. Le ofreció 60.000 euros por el crimen, pero dos meses antes del «día D», su contacto, apodado «Zarco», fue arrestado por otros asuntos. El encargo, según el fiscal, quedó en manos de un padre, sus dos hijos y un cuarto hombre. Les prometió la mitad. Ahora se enfrentan a 22 años y medio de cárcel.
Noticias relacionadas
Ver comentarios