Un piquete toma el Rectorado de la Complutense al grito de «huelga, huelga»

En medio de silbidos y caceloradas, los manifestantes llenaron el vestíbulo del Rectorado de octavillas. A continuación, y por las escaleras, han subido hasta la planta tercera, donde se encuentra el despacho del rector, y donde Carrillo mantenía una rueda de Prensa. Mientras el rector insistía en su afán dialogador, a escasos metros se escuchaban los gritos y algún que porrazo en las puertas de acceso a los despachos del equipo rectoral.

Hoy ha empezado una huelga en la Complutense que también hay para mañana, día 6. La segunda fase de estos paros es para los días 13 y 14 de febrero. Convocan CC.OO, CSIF, CSIT-UP, SAP y UGT. Según los sindicatos, la huelga ha afectado esta mañana al 90% del Personal de Administración y Servicios (PAS) y al 60% del Personal Docente e Investigador (PDI). Como en toda guerra de cifras, Carrillo ha informado que en la Complutense «hay normalidad académica» y que se estaban realizando exámenes pero que sí habían sellado con silicona y pegamento algunas facultades a primera hora de la mañana, lo que había retrasado la apertura de algunos centros.

En las octavillas sindicales, la huelga en la Complutense está motivada, por ejemplo, por «te han rebajado el sueldo una y otra vez», «tienes más carga de trabajo porque no sustituyen bajas ni jubilaciones», «te han quitado la paga extra de Navidad», «te han subido los años de cotización... Muy pronto volverán a recortar tu sueldo».

El rector Carrillo, que ha leído una de estas octavillas a petición de ABC, asegura que «ninguno de esos puntos es culpa de la Complutense». Él, volvió a señalar que gran parte de la «grave situación» en que se encuentra esta Universidad es la asfixia a que les somete el Gobierno regional: «Desde junio pasado tenemos 70 millones de euros menos». También ha recordado que «ha heredado una deuda de 150 millones de euros» (del anterior rector, Carlos Berzosa) y «que, de milagro, no ha crecido».

«Yo no quiero despedir a nadie. De hecho, no hay despidos. Lo que sí es necesario es recortar 13,2 millones de euros» del capítulo de personal: 9,3 del personal docente y 3,9 del de administración y servicios. Los sindicatos se niegan. De ahí, la huelga.