Un análisis mejora el porcentaje de acierto del TAC en el cáncer de colon

El método habitual para comprobar, cada tres meses, que el tratamiento está siendo efectivo es mediante la realización de un TAC. Sin embargo, se están llevando a cabo ensayos clínicos —con una muestra que aún será preciso ampliar para obtener resultados más robustos— en los que mensualmente se realiza un análisis de sangre que permite aligerar los plazos y aumentar el grado de acierto . «Nos adelantamos al TAC y damos la oportunidad de buscar otro tratamiento. Supone un beneficio al paciente y un ahorro económico», explica López. En la actualidad, los enfermos estudiados son de los hospitales de Vigo, Compostela y Ferrol.

En el 26 por ciento de los casos examinados, el análisis —que aísla células circulantes tumorales para sacar información de determinados genes— concluía que el tratamiento no estaba funcionando, mientras que el TAC aseguraba que sí. La razón estaba del lado del análisis. Es decir, que en uno de cada cuatro casos, el TAC se equivocaba y el análisis, no . Para la extracción de sangre no haría falta ir al hospital, sino que podría realizarse en el propio centro de salud. El estudio se está desarrollando en el primer mes de tratamiento, pero el periodo de comprobación podría reducirse incluso a los quince días. Al no querer lanzar las campanas al vuelo, López advirtió que habitualmente, «de 7.000 ideas sólo una tiene éxito».

Esta afirmación la hizo ayer durante un encuentro con la prensa encabezado por la directora xeral de Innovación y Gestión de Salud Pública de la Xunta, Sonia Martínez Arca . En él se dio a conocer el programa desarrollado por el Sergas , con casi 3 millones de euros, para ayudar a que las investigaciones de sus trabajadores prosperen y contribuyan a generar empleo al tiempo que suponen un ahorro para la administración autonómica. Convencida de que en Galicia no hay ninguna organización con el potencial de conocimiento científico del Sergas , Martínez Arca promueve con este plan PRIS (Programa de desarrollo pre-comercial de los resultados de investigación del Sistema Público de Salud de Galicia) ensayos clínicos de los que habitualmente se encargan empresas privadas.

Otra las investigaciones incluidas en esta iniciativa la presentó el neurólogo Miguel Blanco, dedicado desde 1997 a aminorar las secuelas causadas por un ictus. Al sufrir uno de ellos, el cerebro libera una sustancia denominada glutamato. A mayores niveles, peor calidad de vida del paciente. En el hospital de Santiago han hallado una molécula cuyo estudio se había abandonado y que permite reducir la cantidad de este elemento en la sangre . Se ha probado ya en siete pacientes y su administración en las tres horas posteriores al infarto cerebral, por ejemplo en la ambulancia que lo traslada a un centro médico, podría minimizar el daño y contribuir a un mejor pronóstico. De confirmarse su efectividad, el doctor Blanco cree que podría comercializarse en tres años .

El último proyecto es del psiquiatra orensano Alejandro García Caballero , que se apoya en las nuevas tecnologías para ayudar a pacientes con esquizofrenia o trastorno bipolar en sus relaciones sociales a la hora de reconocer características del lenguaje figurado como la ironía o a la hora de mejorar en la identificación de gestos faciales. La gran aportación de esta investigación es que se lleva a cabo por completo de forma telemática, lo que permite ampliar la terapia presencial con las ventajas de interactuación para este tipo de pacientes o el mejor estudio de los datos, que son almacenados. El trabajo incluye desde juegos con fotografías o mímica hasta un cortometraje.