ENTREVISTA
«Las carreteras se convertirán en circuítos para la Fórmula 1»
Jean Picard, la delegada de Stop Accidentes en Galicia defiende que la limitación de velocidad vuelva a los 110 kilómetros por hora porque «a más rapidez, más gravedad»
P. ABET
—¿La normativa que eleva la limitación de 130 kilómetros para determinados tramos es una medida positiva para las carreteras gallegas?
—No, sin duda. Nuestra postura es que se trata de una normativa que incita a la velocidad y que desde luego cualquier distracción ... que provoque un choque, al ir a mayor velocidad, tendrá mayores consecuencias, ya sea para convertir el siniestro en mortal o en más grave. La velocidad agrava las consecuencias de los accidentes, eso es una ecuación que no tiene vuelta.
—¿Los conductores correrán más porque cuentan con el margen del radar?
—La gran mayoría de los conductores queremos convivir en la carretera y, desde luego, 120 kilómetros hora es más que suficiente porque todo esto se aumenta con los radares. Ahora el radar va a saltar a 140 y los que puedan pagar las multas irán a 160. Lo que nosotros no queremos es encontrarnos en una autopista donde la velocidad manda y que de repente, porque el tramo sea de 130, la vía se convierta en un circuito de Fórmula 1. Esto no solo aumenta la gravedad de los accidente sino también la contaminación.
—¿Están a favor de, en lugar de elevar la velocidad en determinados puntos, rebajarla en todas las autovías y autopistas a 110?
—Por supuesto. Cuando regía la norma de los 110, que duró poco, los conductores iban mucho más tranquilos en las autopistas y había menos contaminación. Además, se gastaba mucha menos gasolina porque conforme pisamos el acelerador, más combustible consumimos. Y estando en crisis, no nos parece nada razonable ir a 130 kilómetros por hora aunque sea solo en algunos tramos. Lo primero es ser educados y respetar las normas.
—De la misma manera que el Gobierno defiende los 130 kilómetros por hora, está a favor de reducir las velocidad en vías convencionales...
—Esa es la gran contradicción de este proyecto de ley, que por un lado en la ciudad nos habla de calmar el tráfico, una cosa que nos parece totalmente necesario, y por otra de convertir las autopistas en circuitos. Da mucha pena porque ese proyecto de ley tiene cosas muy buenas, pero decir que se puede ir a 130, aunque solo sea para tramos muy restringidos, es un mensaje perjudicial para la sociedad.
—¿Está a favor del aumento de las sanciones para quien conduce bajo los efectos del alcohol?
—Está claro, tolerancia cero al volante siempre.
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