Dolor en el recuerdo del JK5022
Dos actos se hicieron eco este martes en la capital grancanaria del quinto aniversario del accidente de Spanair, donde murieron 154 personas, buena parte de ellas canarias
Dolor en el recuerdo del JK5022
Con la mención —una por una y por su nombre— de las víctimas, este martes se recordó el accidente del vuelo JK5022 de Spanair en Las Palmas de Gran Canaria, uno de los polos de atención en este quinto aniversario del desgraciado hecho donde ... murieron 154 personas, muchas de ellas de origen o residencia canaria. En la «Plaza de la Memoria», ubicada en la calle Venegas, los familiares fueron depositando, cada uno a su turno, un ramo de flores a los pies del monumento donde se inscribe el nombre de los fallecidos.
La lectura de un poema y la interpretación de una breve pieza de Bach al violonchelo cerraron un acto sobrio y al que asistió un centenar de personas. Los versos elegidos fueron «No vale», de Agustín Millares Sall, de marcado contenido político —el autor sufrió en carne propia la represión franquista— y que incluso fueron rescatados en su día por algunos miembros del movimiento 15M en sus manifestaciones.
Como portavoz de los familiares de las víctimas actuó Ángeles Piretti, quien insistió en la tesis de la asociación de víctimas de la que es vocal, es decir, rechazar el archivo judicial de la investigación del accidente. Incluso, recomendó, aunque lo hizo a título personal, el visionado de un documental («JK5022, una cadena de errores») que, dijo, refleja la visión del grupo del que forma parte y que iba a ser programado por la noche en La Sexta.
Al acto acudieron numerosas autoridades, entre las que se encontraban el ministro de Industria, José Manuel Soria; el presidente del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero; y el alcalde de Las Palmas de Gran Canaria, Juan José Cardona, entre otros. El ministro Soria atribuyó al «empuje y al tesón» de la asociación de familiares de víctimas que se haya conseguido que, el pasado 2 de agosto, se aprobase por parte del Consejo de Ministros, un Real Decreto para que en el caso de que ocurra una tragedia como la del 20 de agosto de 2008, las víctimas de los accidentes de la aviación «puedan tener una atención coordinada y unitaria por parte de todos los servicios».
El alcalde Cardona entendió el acto como «no de intervenciones, ni de discursos, ni de palabras», sino que se trataba de un encuentro «para recordar la memoria de las personas que se fueron, y para agradecer la batalla y la lucha que la asociación lleva realizando durante los últimos cinco años».
Poco antes, pero en la zona de La Puntilla, en un extremo de la playa de Las Canteras, se había celebrado otro acto de similar emotividad. Los familiares se encargaron allí de una ofrenda floral a los pasajeros del vuelo JK5022, al lanzar al mar 154 rosas blancas en recuerdo a cada una de las personas que perdieron la vida hace cinco años.
Durante ese primer homenaje, el presidente del Cabildo de Gran Canaria, José Miguel Bravo de Laguna, expresó a las familias el apoyo de la corporación insular y se declaró optimista ante los esfuerzos que están realizando los afectados para prevenir que se repitan situaciones similares a la vivida en Barajas en 2008.
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