Las pymes, las más castigadas por la restricción
La economía del Archipiélago se cimienta fundamentalmente en pequeñas y medianas empresas, pymes, que precisamente son las más castigadas por la restricción crediticia. La razón de que sean estas las que peor lo están pasando radica en que no disponen, al margen del préstamo bancario, ... de las posibilidades de financiación de que sí disfrutan las grandes sociedades, tales como los bonos o los pagarés, por ejemplo. Ello explica el porqué de que la caída del volumen del crédito concedido en la comunidad autónoma haya sido mayor que en el conjunto del Estado. Si los préstamos de la banca en las Islas suponían allá en 2007 el 3,2% del total nacional, hoy apenas representan el 2,9%. Y cabe recordar que el crecimiento económico, el desempleo y el flujo del crédito son tres variables estrechamente relacionadas, de forma tal que si esta última aumenta, lo hace también la primera (la economía) y decrece el paro. No en vano llevan años insistiendo los expertos en que, sin préstamos, no hay solución a corto plazo.
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