política
Sigfrid Soria se disculpa, pero será apartado de la Directiva del PP nacional
El exdiputado de Lanzarote había amenazado con dar «hostias» a los tuiteros «perroflautas», que comparó con el Ku Klux Klan
B. S.
«Son tan cobardes los tuiteros perroflautas como lo eran los del Ku Klux Klan, cuando linchaban a seres humanos con sus identidades ocultas» o «Si algún perroflauta agrediera a alguna de mis hijas, le arranco la cabeza». Son algunas de las expresiones vertidas en ... la red social Twitter que le costarán el puesto en la Junta Directiva Nacional del PP a Sigfrid Soria, exdiputado regional canario que a última hora de la noche del jueves se lanzó contra quienes en toda España convocan «escraches» frente al domicilio particular de los dirigentes de su partido.
«Como un perroflauta me acose por la calle, me intimide o me agreda, la hostia que se lleva ni se la va a creer», lanzó en un «tuit», al tiempo que aclaraba que «el drama de los desahucios hay que atenderlo con toda nuestra capacidad».
Pasado el mediodía, y tras haber revolucionado esta red social de «microblogging» —donde surgieron tantos adeptos como detractores—, el político lanzaroteño se disculpó: «Siento, y pido disculpas por ello, haber usado un lenguaje inapropiado».
A esa hora, ya había pasado la desautorización por parte del «número dos» del PP canario, Asier Antona, quien ponía en marcha un expediente sancionador a través del vicesecretario de Organización, Carlos Floriano. Soria, que no guarda parentesco con el ministro del mismo apellido, ocupa una silla en la directiva nacional por haberse encargado de la organización del PP de Costa Rica, como presidente de la gestora.
«Sociedad descafeinada»
A primera hora de la mañana, Sigfrid Soria defendía los mensajes lanzados a la red Twitter en los micrófonos de la Cope , al reclamar que no se olvidase «el principio de la legítima defensa» ante una agresión. «Estamos en una sociedad tan descafeinada que olvidamos los principios fundamentales de la convivencia», señaló este profesor de Educación Física, que ha dado clase en varios institutos de la isla de Lanzarote.
«En el momento en que yo me encuentre agredido, yo responderé proporcionalmente. Y si esa respuesta tiene que ser una hostia proporcional, daré una hostia a quien sea. Ojalá todos los ciudadanos dijéramos lo mismo», señaló en la misma entrevista este exdiputado, cuyo paso por el Parlamento de Canarias se inició en abril de 2008 y concluyó antes de las elecciones de mayo de 2011.
Al margen de las respuestas políticas dentro de su propio partido, el eco formidable que tuvieron sus tuits se reflejaba en la enorme cantidad de respuesta que ofrecían los internautas. «No tienes ni idea de cómo se recoge la legítima defensa en el Código Penal. ¿Cuántas películas has visto de Bruce Lee?», decía alguien, mientras del otro lado, en su apoyo, otros se preguntaban «¿Qué lenguaje hay que aplicar a la chusma que te llama asesino y aporrea la puerta de tu casa?».
No lo apoyaron tanto en su propia isla, ya que la presidente insular del PP de Lanzarote, Astrid Pérez, a última hora de ayer había solicitado la expulsión de Soria del partido a causa de sus declaraciones, al tiempo que mostraba su «enérgica condena a todo tipo de actitudes fascistas, vengan de donde vengan».
Desde la plataforma «Stop Desahucios» —los principales aludidos en su ataque— reclamaron que el PP cumpla con su palabra y aparte a Soria, mientras que defendían que su grupo siempre ha actuado «de manera pacífica» y nunca ha pretendido ejercer «ningún tipo de violencia contra ningún político».
Sigfrid Soria se disculpa, pero será apartado de la Directiva del PP nacional
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete