El régimen de Irán llama a sus seguidores a marchar contra las protestas «alentadas por extranjeros»
El presidente Raisi advierte a los manifestantes de que «el caos no es aceptable» y el ejército acusa a «enemigos» de Irán de alentar las manifestaciones
Más de 30 muertos en Irán en las peores protestas de los últimos tres años
Una manifestante hace el signo de la victoria en las marchas en favor del Gobierno en Teherán
El régimen iraní da un paso adelante para acallar las protestas en las que miles de personas piden el final del uso obligatorio del hiyab y muestran su enfado por la muerte de una joven kurda a manos de la policía de la moral. ... Las autoridades movilizaron a sus seguidores para marchar por las principales ciudades del país tras la oración del viernes en señal de apoyo al uso del velo para las mujeres y en contra de las protestas «alentadas por extranjeros». Fueron marchas que se cubrieron al detalle por los medios oficiales para enviar las imágenes a todo el mundo. Todo lo contrario de lo que ocurre con las protestas opositoras de cada día, de las que solo salen vídeos de teléfonos móviles subidos a las redes sociales.
Ebrahim Raisi ha necesitado una semana para responder a las movilizaciones más graves que sufre Irán en los tres últimos años y que dejan decenas de muertos y cientos de heridos y detenidos. El presidente envió un mensaje directo a los manifestantes para decirles que «el caos es inaceptable» en la república islámica. El presidente lamentó el «doble rasero» que se aplica con su país ya que «cada día, en diferentes países, incluido Estados Unidos, vemos como hombres y mujeres mueren en las comisarías, pero no hay apenas reacciones en los medios con este tipo de violencia».
Estas palabras vinieron acompañadas de un comunicado del ejército que se muestra «dispuesto a enfrentarse a los enemigos» y que tacha las revueltas de «acciones desesperadas de la estrategia diabólica del enemigo para debilitar al régimen islámico», lo que significa que echan la culpa de la escalada de tensión a Israel y Estados Unidos. Una de las estrategias habituales del régimen de los ayatolás es culpar de todos los males a la injerencia extranjera, que existe y es intensa, evitando hacer cualquier ejercicio de autocrítica.
Sin líderes
Desde hace una semana las protestas se han extendido desde el Kurdistán de Irán a cincuenta ciudades del país. Mahsa Amimi tenía 22 años y era kurda, viajó a Teherán a visitar a unos familiares y perdió la vida a manos de la policía de la moral, que le detuvo por no llevar el velo de manera correcta. La policía asegura que sufrió un infarto, pero la familia denuncia que el cuerpo presentaba marcas de malos tratos.
Hace tres años los iraníes se echaron a la calle de forma masiva para protestar por la subida de los precios y el régimen respondió con dureza. Ahora lo hacen para pedir el final de una las normas en vigor desde la creación de la república islámica como es el uso del hiyab y vuelven a encontrarse con la misma reacción. En 2019, el enfado fue sofocado por las fuerzas de seguridad y el cansancio y el miedo pudieron con unos manifestantes sin un liderazgo capaz de hacer frente al sistema de los ayatolás.