Los aliados reanudan el bombardeo sobre Trípoli

Los ataques aéreos prosiguen a esta hora. 19 aviones estadounidenses han disparado hasta cuarenta bombas contra un aeropuerto del este del país mientras que las fuerzas británicas han atacado "el sistema integrado de defensa aérea libio". Las operaciones se han concentrado principalmente en la parte occidental de Libia, en objetivos situados cerca de Trípoli y Misrata. En estos momentos se registra un "intenso fuego de aviación" sobre el centro de Trípoli y la defensa antiaérea gadafista ha comenzado a disparar. La cadena Al Jazeera ha apuntado que los disparos partían del palacio de Gadafi, Bab El Aziziya, donde se puede ver una columna de humo, y desde algún lugar del centro de la ciudad. La cadena ha difundido también imágenes que mostraban proyectiles trazadores que atravesaban el cielo de Trípoli pero no ha precisado si habían alcanzado su objetivo.

Un portavoz del Ejército libio ha informado de que se ha ordenado a todas las unidades un alto el fuego a partir de las 21.00 horas de esta noche, las 20.00 hora peninsular española. Esta medida ha sido adoptada teniendo en cuenta "las muertes de civiles" y "la destrucción de edificios civiles y militares". Se trata del segundo alto el fuego declarado por el régimen desde la aprobación de la resolución 1973 del Consejo de Seguridad de la ONU y, dado el precedente, ya no convence a nadie. El consejero de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Tom Donilon, ha señalado que su opinión "es que no es auténtico o que ha sido violado de inmediato". Además, un periodista de Reuters ha informado de que se podían escuchar intensos tiroteos y explosiones esporádicas en el centro de Bengasi tras la hora fijada.

Pero los reveses sufridos en las últimas horas no han mermado el ánimo del dictador que ha tachado de "actos de terrorismo" los ataques y ha advertido de que luchará hasta el final con la ayuda de sus simpatizantes, a quienes ha abierto los arsenales de las zonas que tiene bajo control para que puedan armarse.

Gadafi ha realizado estas declaraciones a través de un mensaje de audio retransmitido por la cadena oficial libia, sobre el plano fijo de la escultura levantada en su residencia de Trípoli, que exhibe un puño dorado que aplasta un avión de combate estadounidense. "No abandonaremos nuestra tierra y vamos a liberarla", ha asegurado Gadafi en el mensaje, en el que anuncia que el país se está preparando para lo que será "una larga guerra" contra lo que ha calificado como "la coalición del diablo", que será "derrotada".

Las fuerzas aliadas occidentales lanzan desde ayer ataques contra las posiciones gadafistas. En aplicación de la recientemente aprobada resolución 1973 del Consejo de Seguridad de la ONU que autoriza tomar "todas las medidas necesarias" para proteger a la población civil", aviones franceses fueron los primeros en abrir fuego contra las tropas de Muamar Gadafi. Poco después, barcos de guerra y submarinos de Estados Unidos y Gran Bretaña lanzaron más de 110 misiles de crucero Tomahawk contra los sistemas antimisiles libios y alcanzaron 20 de los 22 objetivos fijados contra las defensas antiaéreas de Gadafi, según informó el Pentágono.

Además, la operación 'Odisea del Amanecer' ha conseguido en las últimas horas una colaborador más. Catar se ha convertido en el primer país árabe en unirse a la ofensiva de los aliados movilizando cuatro aviones que ya están camino de posiciones más próximas a Libia. El portavoz del Ministerio de Defensa francés, Laurent Teisseire, ha puntualizado que las aeronaves son de origen galo y que el Elíseo "ha tomado la decisión de desplegar cierto número de aparatos para poder actuar de manera conjunta" con las fuerzas cataríes.

En cuanto a la aportación española, el jefe de Mando de Operaciones (CMOPS), teniente general Jaime Domínguez Buj, ha confirmado que los cuatro cazas F-18 y el avión de reabastecimiento en vuelo desplegados están ya integrados en el mando de la coalición y preparados para actuar en cuanto reciban la orden, si bien todavía no han intervenido en ninguna acción aérea.

Mientras, la calma parece haberse apoderado de Bengasi, la segunda ciudad más importante de Libia y principal bastión de los sublevados, así como escenario ayer sábado de una fulgurante ofensiva de las fuerzas gadafistas apoyadas por aviación, carros de combate, artillería pesada y lanza misiles Grad. No es el mismo caso de Misrata, que ha sido tomada este domingo por carros de combate de las fuerzas leales a Gadafi destruyendo a su paso los depósitos de combustible y una central eléctrica y donde se ha registrado un número "incontable" de víctimas.

China y Rusia, que se abstuvieron la semana pasada en la votación del Consejo de Seguridad que respaldó la intervención, han expresado hoy su pesar por la acción militar. El Ministerio de Asuntos Exteriores chino espera que el conflicto no lleve a una mayor pérdida de vidas civiles, al igual que la Liga Árabe cuyo secretario general Amro Musa, ha asegurado que la protección de los civiles "no necesita de una operación militar". "Lo que queremos es protegerlos y no bombardear a más civiles", ha defendido. En la misma línea se ha mostrado la Unión Africana (UA), que ha pedido "contención" a todas las partes implicadas en el conflicto y el fin inmediato de las hostilidades.