Los palestinos rechazan «arrendar» el Valle del Jordán

Fuentes palestinas han desmentido rotundamente informaciones aparecidas hoy en la prensa israelí, según las cuales EE.UU. habría propuesto a Israel que, tras la firma de un acuerdo de paz, alquile el Valle del Jordán para poder conservar así el control sobre ese territorio. La exigencia del primer ministro judío, Benjamin Netanyahu, es que el futuro Estado Palestino esté absolutamente desmilitarizado, pretensión que implicaría sellar ese flanco este, fronterizo con Jordania, para impedir el ingreso de armas. La idea de Netanyahu, así como la de su antecesor, Ehud Olmert, sería establecer allí tropas israelíes de forma permanente.

Radio Israel ha dicho esta mañana que los norteamericanos habrían hablado de un arrendamiento de siete años y que el jefe del Gobierno israelí no lo habría rechazado, sino incluso considerado que podría extenderse «durante decenas de años». Para los palestinos, todo lo publicado al respecto es una «mentira descabellada» y, advierten, un «globo sonda levantado por Israel».

De acuerdo con fuentes palestinas implicadas en las negociaciones, en primer lugar «los palestinos tenemos garantizado el compromiso de Estados Unidos de que no van a plantear a Israel nada que pudiera comprometer el estatus quo del futuro Estado palestino como Estado soberano». «Junto a ello —añadió—, Washington está de acuerdo con nosotros en que no estamos interesados en ningún tipo de solución interina, y menos que pasara por arrendar nuestras propiedades». Asimismo, la fuente, que prefirió no ser identificada, insistió en que los palestinos podrían aceptar la presencia internacional en la frontera de separación con Jordania, pero «nunca de soldados israelíes».

«Este globo, esta falsedad retrata muy bien cómo entendemos cada uno el proceso de paz: nosotros y la Comunidad Internacional estamos apostando por ver dos Estados en las fronteras de 1967, y mientras tanto Israel sólo se preocupa por intentar que la ocupación parezca más digerible para tratar de eternizarla», concluía la fuente.

La aparición de esta presunta filtración se produce en un momento en que el proceso de paz que el pasado 2 de septiembre se inauguraba en Washington se encuentra en punto muerto. La reanudación de la construcción en las colonias judías a finales de ese mes frenaba en seco los contactos directos entre Israel y los palestinos, que exigen una nueva congelación de los asentamientos como condición para restablecer el diálogo. Por decisión de la Liga Árabe, han determinado que solo esperarán hasta mediados de noviembre , fecha a partir de la cual ya hay previsto un plan alternativo que pasaría por solicitar primero a EE.UU., y luego al Consejo de Seguridad de la ONU el reconocimiento de Palestina como Estado de Pleno Derecho dentro de la Comunidad Internacional.

Hoy mismo, Benjamin Netanyahu advertía de nuevo que semejante paso unilateral tendrá «un precio» para ambas partes y que no servirá para avanzar en la paz, al tiempo que subrayaba que EE.UU. no ha hecho a Israel ninguna oferta a cambio de que se declare una nueva moratoria a la construcción en las colonias.

Radio Israel ha dicho esta mañana que los norteamericanos habrían hablado de un arrendamiento de siete años y que el jefe del Gobierno israelí no lo habría rechazado, sino incluso considerado que podría extenderse «durante decenas de años». Para los palestinos, todo lo publicado al respecto es una «mentira descabellada» y, advierten, un «globo sonda levantado por Israel».

De acuerdo con fuentes palestinas implicadas en las negociaciones, en primer lugar «los palestinos tenemos garantizado el compromiso de Estados Unidos de que no van a plantear a Israel nada que pudiera comprometer el estatus quo del futuro Estado palestino como Estado soberano». «Junto a ello —añadió—, Washington está de acuerdo con nosotros en que no estamos interesados en ningún tipo de solución interina, y menos que pasara por arrendar nuestras propiedades». Asimismo, la fuente, que prefirió no ser identificada, insistió en que los palestinos podrían aceptar la presencia internacional en la frontera de separación con Jordania, pero «nunca de soldados israelíes».

«Este globo, esta falsedad retrata muy bien cómo entendemos cada uno el proceso de paz: nosotros y la Comunidad Internacional estamos apostando por ver dos Estados en las fronteras de 1967, y mientras tanto Israel sólo se preocupa por intentar que la ocupación parezca más digerible para tratar de eternizarla», concluía la fuente.

La aparición de esta presunta filtración se produce en un momento en que el proceso de paz que el pasado 2 de septiembre se inauguraba en Washington se encuentra en punto muerto. La reanudación de la construcción en las colonias judías a finales de ese mes frenaba en seco los contactos directos entre Israel y los palestinos, que exigen una nueva congelación de los asentamientos como condición para restablecer el diálogo. Por decisión de la Liga Árabe, han determinado que solo esperarán hasta mediados de noviembre , fecha a partir de la cual ya hay previsto un plan alternativo que pasaría por solicitar primero a EE.UU., y luego al Consejo de Seguridad de la ONU el reconocimiento de Palestina como Estado de Pleno Derecho dentro de la Comunidad Internacional.

Hoy mismo, Benjamin Netanyahu advertía de nuevo que semejante paso unilateral tendrá «un precio» para ambas partes y que no servirá para avanzar en la paz, al tiempo que subrayaba que EE.UU. no ha hecho a Israel ninguna oferta a cambio de que se declare una nueva moratoria a la construcción en las colonias.