¿La guerra está a punto de volver a Ucrania?

El presidente ucraniano, Petro Poroshenko , ordenó este jueves poner en estado de «máxima alerta de combate» a todas las tropas desplegadas en la frontera con Crimea y en la línea de separación de fuerzas con los r ebeldes prorrusos en el este del país. Al mismo tiempo, su homólogo ruso, Vladimir Putin , acusó a Ucrania de preparar atentados terroristas en la península y advirtió de que ese «juego peligroso» tendrá consecuencias para Kiev.

El Servicio Federal de Seguridad de Rusia ( FSB, antiguo KGB ) ha denunciado esta semana que grupos de la inteligencia militar ucraniana intentaron infiltrarse en Crimea en dos operaciones de sabotaje -en las madrugadas del 7 y 8 de agosto- con el objetivo de atentar contra «infraestructuras vitales de la península». Al parecer, un agente del FSB y un militar ruso murieron en choques con los ucranianos que, según Moscú, apoyaron con fuego de blindados el segundo intento de entrar en un territorio que los rusos consideran suyo, informa Efe.

Rusia se anexionó Crimea en marzo de 2014, después de un cuestionado referéndum en el que el 97% de los votantes supuestamente apoyó la reunificicación. La península había sido cedido a Ucrania en 1954, en la era soviética. A la secesión de Crimea siguió una guerra en el este de Ucrania, cuya población es mayoritariamente de origen ruso. Poco más de dos años se cobraron la vida, según datos de Naciones Unidas, de cerca de 10.000 personas.

El Ministerio de Defensa ucraniano desmintió las acusaciones de sabotaje a través de un comunicado oficial y las calificó de «intento de justificar las acciones agresivas de las unidades militares de Rusia en el territorio de la península anexionada». «Si hubiéramos usado armamento pesado, blindados o sistemas de misiles, créame, la Federación de Rusia lo habría gritado a los cuatro vientos el mismo 8 de agosto», declaró en televisión el portavoz de la Dirección General de Inteligencia de Ucrania, Vadim Skibitski .

El número dos de la Guardia de Fronteras ucraniana, Oleg Slobodian , denunció este jueves que Moscú ha desplegado en esa zona «unidades de elite dotadas de armamento moderno, capaces de actuar en situaciones críticas y con habilidades especiales» de combate. El oficial ucraniano no pudo precisar, sin embargo, si el número de tropas rusas en la frontera con Crimea había aumentado, pero expresó su preocupación por el hecho de que unidades ordinarias hayan sido reemplazadas por fuerzas especiales .

El este de Ucrania, donde en teoría rige un alto el fuego desde la firma de los A cuerdos de Minsk de febrero de 2015 , vive en las últimas semanas una escalada de tensión debido al incremento de las hostilidades . Las negociaciones de paz están estancadas, entre otras razones por la falta de acuerdo sobre las elecciones en las zonas controladas por los separatistas, ya que Kiev exige garantías de seguridad y la presencia de observadores internacionales.

Además, Ucrania demanda el control de la frontera entre las regiones de Donetsk y Lugansk y el territorio ruso, mientras Moscú pide a Kiev que apruebe antes una ley que otorgue un estatus especial a las zonas separatistas.