Fallos electricos y falta de combustible: el origen incierto de la tragedia aérea del Chapecoense

Se trataba de un Avro Regional Jet 85 de la compañía Lamia que —con 22 futbolistas, 28 acompañantes, el personal técnico, 22 periodistas de medios brasileños y nueve tripulantes a bordo— había partido del Aeropuerto Internacional Viru Viru en la ciudad de Santa Cruz de la Sierra (Bolivia), estrellándose después en la zona del Cerro Gordo de la Unión , entre los municipios de La Unión y La Ceja, justo cuando se aproximaba al aeropuerto José María Córdoba de Medellín (Colombia).

Según informó el director del aeropuerto de Viru Viru, Adid Cabrera , el aparato no tenía fallos graves cuando despegó desde este aeródromo, ya que había sido sometido a un examen rutinario. «Al avión se le hizo un chequeo de rutina, como siempre se hace a los vuelos chárter para tener un vuelo seguro. No se reportaron fallos graves», aseguró en una entrevista concedida a la cadena Blu Radio.

La delegación del club Chapecoense debió cambiar sus planes de vuelo a Colombia por una decisión de la autoridad de la aviación brasileña, que le impidió desplazarse a Medellín en un vuelo chárter, por lo que debió embarcar en el avión comercial siniestrado.

El accidente tuvo lugar en torno a las 22.00 horas del lunes, cuando la aeronave se precipitó, de repente, contra el suelo por motivos que aún desconocen. Según los datos mostrados por el portal FlightRadar24 , voló en círculos antes de estrellarse.

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En su primer comunicado sobre el siniestro, el aeropuerto José María Córdova de Rionegro señaló que el avión se declaró en «emergencia» e informó de que tenía algunos «fallos eléctricos». «El avión pidió prelación para aterrizar en Rionegro y se le dio, pero luego se perdió el contacto», aseguró Alfredo Bocanegra , director de Aeronáutica Civil de Colombia.

Se sabe que el comandante vació de combustible de la nave antes de precipitarse contra el suelo, lo que ha evitado que murieran todos los ocupantes y que finalmente puedan contabilizarse seis supervivientes : los jugadores Alan Luciano Ruschel, Jakson Ragnar Follmann y Hélio Hermito Zamper Neto; el periodista Rafael Valmorbida, y los tripulantes Ximena Suárez, auxiliar de vuelo, y el técnico de la aeronave Erwin Tumiri, que fueron trasladados a tres clínicas cercanas a Medellín.

Sin embargo, una de las posibles causas que se manejan es que la aeronave se quedara sin combustible. Esta hipótesis surgió horas después por el testimonio de Ximena Suárez , la única auxiliar de vuelo que sobrevivió al accidente, según informa el diario « El Colombiano ».

Entre las posibles causas que se barajan, también se encuentra el mal tiempo y el elevado número de tormentas que se produjeron durante el vuelo. De hecho, las labores de rescate en las que participan más de 150 personas debieron suspenderse temporalmente en la madrugada debido a las malas condiciones climatológicas, en una zona a 3.300 metros altitud de muy difícil acceso.

«En este momento avanza la investigación sobre las circunstancias exactas y posibles causas de esta triste tragedia», comentó el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos , en una intervención televisada. La directiva del Chapecoense esperará a tener información más detallada de las autoridades colombianas para pronunciarse sobre el accidente del avión en el que viajaba el equipo brasileño.