«El Gobierno está del lado de los delincuentes, no de la ciudadanía»

«Mi hijo es uno de los que mataron. Yo no quería aceptarlo, quería pensar que mi hijo estaba vivo. Vivos se los llevaron y vivos los queríamos», se queja con la voz quebrada Ezequiel Mora, repitiendo la consigna con la que las 43 familias llevan más de sesenta días tomando las calles en unas protestas que se han multiplicado más allá del estado de Guerrero ante la aparente pasividad de las autoridades. «Siento que no aguanto este dolor», añade el padre de Alexander, tratando de describir su pena.

«Es mentira que el presidente Peña Nieto nos esté dando apoyo a nosotros. Es solo de boca. No confiamos nada en ellos. Nuestros hijos están desaparecidos», señala Ezequiel Mora en la entrevista. «Yo mandé a mi hijo a estudiar allá (…), pero, la verdad, no sé qué se va a hacer por parte del Gobierno. Nunca apoyó a los jóvenes. A 300 metros (estaban) los militares... Y para nosotros no está bien lo que hicieron porque el mismo Gobierno está metido con la delincuencia organizada».

«Si hubieran sido respetuosos con los jóvenes les habrían dado su apoyo, pero, al contrario, les quitaron sus (teléfonos) celulares... Es un Gobierno del lado de la delincuencia, no del lado de la ciudadanía», insiste.

¿Y tras confirmarse la muerte de Alexander? «Pues, la verdad, voy a tener que seguir luchando, porque no me va a quedar otra», sentencia.

En esa misma dirección se ha manifestado también el portavoz de las 43 familias, Felipe de la Cruz Varela, en declaraciones a la cadena COPE. Ha sido «horroroso, pero no nos vamos a derrumbar». «La esperanza es lo último que muere. Hasta que no nos confirmen que están fallecidos los seguiremos buscando vivos», añade, insistiendo en que todavía quedan otros 42 además de Alexander Mora.