La ONU evita de nuevo imponer la vigilancia de los derechos humanos en el Sahara

La resolución «alenta a las partes concernidas a trabajar con la comunidad internacional para preparar y aplicar medidas creíbles e independientes para asegurar el pleno respeto de los derechos humanos», informa France Presse. Entre las mejoras deben estar las de «libertad de expresión y asociación». Es, claramente, una victoria para las posturas restrictivas en ese sentido del reino alauí, que ve cómo ese «alentar» no obliga absolutamente a nada ni a la ONU ni a las partes.

Rabat no ha tardado en expresar su alegría por medio de un comunicado del Ministerio de Exteriores, según la agencia oficial Map .

Instaurada en 1991 para vigilar el alto el fuego y organizar el referéndum de autodeterminación, la Misión de la ONU en el Sahara Occidental (Minurso) lleva sobre el terreno más de dos décadas sin recibir el mandato de vigilar los abusos que se cometen sobre los derechos humanos, al contrario que el resto de misiones de la ONU. El Consejo de Seguridad se ha limitado a ampliar un año más -hasta finales de abril de 2015- la presencia de la Minurso en el territorio en disputa.

En 2013 el ímpetu con el que Estados Unidos lucho en la ONU -sin conseguirlo- para que se impusiera la vigilancia de los derechos humanos en la ex colonia española acabó en bronca diplomática con Rabat . Las aguas diplomáticas volvieron a su cauce y el territorio sigue siendo escenario de los mismos abusos sin la corresponmdiente denuncia oficial.