La ONU muestra su preocupación por los sirios que han llegado a Melilla

España no es un destino importante en comparación con los países fronterizos al conflicto, pero en el último año se ha multiplicado la llegada y sólo en los diez primeros meses de 2013 se han cursado 600 peticiones de asilo de personas de ese país principalmente en Madrid, Barcelona y Valencia, según ACNUR.

No todos los sirios que llegan a España cursan la solicitud de asilo, pues algunos entienden que abrir ese proceso puede frenar o retrasar su intento de llegar a otros países europeos. Esto explica, por ejemplo, que la ONG melillense Prodein calcule que sólo a esa ciudad hayan llegado unos 200 a través del vecino Marruecos . La mitad de ellos serían niños sirios, que en la actualidad representan aproximadamente el diez por ciento de la población del CETI.

La agencia de los refugiados mantiene desde ayer y hasta mañana una delegación en Melilla encabezada por su jefa en España, Francesca Friz-Prguda , llegada al puesto el pasado mes de octubre. Mantendrá reuniones con las autoridades locales, organizaciones humanitarias y con los propios inmigrantes. El asunto de los sirios ocupa una parte destacada en la agenda.

«En estos momentos, en Melilla se encuentra un alto número de niños, mayoritariamente sirios , que requieren una atención especial, ya no sólo por ser menores, sino porque muchos de ellos han sufrido las graves consecuencias de la guerra y el exilio», afirma ACNUR en un comunicado.

Las dos ciudades autónomas del norte de África no representan un porcentaje importante en el flujo de sirios que llegan a territorio español, pero sí que suponen un problema múltiple dadas las características geográficas de ambos enclaves.

Los sirios que piden asilo en Ceuta y Melilla, a diferencia de los que lo hacen en el resto de España, no pueden salir de esas ciudades mientras esperan la resolución de su demanda. Esto ha provocado manifestaciones, encabezadas a veces por niños de corta edad que han dejado atrás la guerra en conpañía de sus padres.

Las protestas concluyeron hace algunas semanas entre promesas de traslado, pero el problema sigue sin resolverse, entiende ACNUR. «Hay unas demoras enormes en los traslados de sirios a la Península» , reconocen a ABC fuentes de esta agencia de la ONU.

Mafias en la valla fronteriza

Un número importante de ellos llegaron a territorio español con la intención de llegar a otros países de la Unión Europea donde tienen familiares y ahora se encuentran «bloqueados» en Ceuta o Melilla.

El CETI de Melilla, con casi mil personas actualmente, dobla su capacidad. «No es un centro de acogida pensado para estancias largas», reconocen desde esa agencia de la ONU al tiempo que recuerdan que esa sobrecarga obliga a veces a romper las familias y mantener a las madres y los menores por un lado y a los padres por otro.

La inmensa mayoría de esas personas llega, además, a través de las vallas levantadas en la frontera con Marruecos de la mano de mafias que, según datos de la ONG melillense Prodein , hacen su agosto porque los sirios disponen de mucho más dinero que los emigrantes subsaharianos.

El 98 por ciento de los refugiados que han escapado de Siria se hallan en países limítrofes: Líbano, Jordania, Irak, Egipto y Turquía , informa ACNUR.