Ucrania, ¿con o sin Europa? Claves para entender la crisis actual

Ahora, tras el «no» del Ejecutivo a asociarse con la Unión Europea, Ucrania vuelve a ser testigo de una oleada de protestas indefinidas . Estos son los puntos clave de la crisis actual.

¿Qué está ocurriendo actualmente?

Tras meses de intensas negociaciones y cuando todo apuntaba en otra dirección, el pasado 21 de noviembre el comisario europeo Aleksander Kwasniewski anunció la negativa de Ucrania a firmar el Acuerdo de Asociación con la UE . La decisión generó una fuerte indignación entre los miembros de la oposición -entre los que destaca la ex ministra Julia Timoshenko , quien ha comenzado en la cárcel una huelga de hambre para sumarse a las manifestaciones de la calle-, la decepción de la UE y la satisfacción de Rusia, clave en toda esta crisis.

Desde entonces miembros de la oposición han convocado actos y protestas contra la decisión del Ejecutivo y el pasado martes continuaron, por tercer día consecutivo, el mitin indefinido que comenzó el domingo en la plaza Europa de Kiev. Es más, cerca de un centenar de personas siguen concentradas frente a la sede gubernamental para exigir la dimisión del primer ministro Azárov. Todos ellos se engloban dentro del ya denominado «Euromaidán», cuyas acciones se han imitado en ciudades como Lvov, muy europeísta, o las orientales de Járkov u Odessa.

Por su parte, el Gobierno ucraniano ha manifestado a través de un comunicado oficial firmado por el primer ministro, Nicolái Azárov, su disposición a reanudar «el diálogo con los países de la Unión Aduanera» (Rusia, Bielorrusia y Kazajastán).

¿Por qué Ucrania no ha firmado el acuerdo?

«Como padre, no puedo dejar a una familia sin pan. Sería deshonesto e injusto si no me preocupara por la gente más indefensa sobre la que puede recaer la carga del periodo de transición». Así justificó el presidente ucraniano, Víctor Yanukóvich, la decisión de su gobierno. Es decir, alegó cuestiones económicas defendiendo además la necesidad del país de desarrollar sus relaciones con Rusia y la comunidad postsoviética en este sentido.

Con todo, pese a estas justificaciones, lo cierto es que las negociaciones de Kiev con Bruselas se han desarrollado en el marco de unas presiones sin precedentes por parte de Moscú , opuesto a la firma, prevista para la cumbre que la UE celebrará con sus vecinos del Este el 28 y 29 en Vilna, la capital de Lituania.

Cabe destacar también que la Unión Europea había impuesto unas condiciones para que se produjera la firma del acuerdo : avances contra la justicia selectiva, cambios en la ley electoral y la puesta en libertad de Timoshenko, quien permanece en la cárcel bajo la acusación de «abuso de poder» tras ser juzgada y condenada a siete años de prisión en un proceso que la propia UE considera poco fiable. Es más, el anuncio de la no firma del acuerdo se produjo después de que la Rada Suprema de Ucrania (cámara legislativa) rechazara los proyectos de ley para que Timoshenko pudiera someterse a tratamiento médico fuera del país, otro aspecto que la UE exigió para llevar a cabo la firma.

¿Qué papel juega Rusia?

Tal y como informa el corresponsal de ABC en Moscú, el Acuerdo de Asociación de Ucrania con la UE incluía un convenio de libre comercio, algo incompatible con su incorporación a la Unión Aduanera rusa . De ahí que el presidente ruso, Vladímir Putin, haya advertido abiertamente sobre la enorme dependencia económica que tiene Ucrania de su país, por lo que amenazó con cerrar el paso de mercancías ucranianas hacia Rusia.

Hay que tener en cuenta la importancia estratégica que tiene Ucrania, quien durante años fue una colonia de Moscú, por su ubicación -es un puente entre Rusia y Occidente - además de ser una pieza muy codiciada por su tamaño y sus importantes recursos naturales. De hecho, según los datos publicados por Eurostat de los que se hace eco la agencia Efe, los intercambios comerciales con el país suponen la mitad del comercio entre la UE y los seis países de la Asociación Oriental.

Con todo, Putin ha pedido a las autoridades europeas que se abstengan de declaraciones «drásticas» sobre Ucrania además de manifestar su «estupor y decepción» por las críticas de Bruselas . Eso sí, nada más conocerse, el Kremlin aplaudió la decisión de Kiev y el portavoz de la presidencia rusa, Dmitri Peskov, celebró que «un socio tan próximo como Ucrania haya decidido optimizar y desarrollar la cooperación económica y comercial con Rusia».

¿Cómo ha reaccionado la UE?

Tanto el presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, como el de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, han manifestado abiertamente ser conscientes de «la presión externa que está experimentando Ucrania ». En este sentido, la UE ha asegurado que mantiene su oferta a Kiev pero rechaza la idea de esta de llevar a cabo un diálogo a tres bandas para discutir la cuestión. Son varias las fuentes comunitarias que han denunciado que Moscú ha disminuido sus intercambios comerciales con Ucrania en los últimos meses como aviso, además de acentuar la situación económica del país.

Por otro lado, Bruselas defiende que el acuerdo es el más ambicioso ambicioso que se ha ofrecido nunca a un no-miembro de la UE, de ahí la decepción europea, además de ser algo parecido a una antesala de adhesión. Es más, la firma de este acuerdo era el principal resultado que estaba previsto en la cumbre de la Asociación Oriental que la UE celebrará el jueves y el viernes en Vilna - y a la que pese a todo acudirá el presidente Yanukóvich- con Armenia, Azerbaiyán, Bielorrusia, Georgia, Moldavia y Ucrania.

Sin embargo, Yanukóvich ha calificado de «humillantes» las condiciones ofrecidas por la UE para firmar el acuerdo y ha advertido de que sólo accederá a un pacto comercial con Bruselas si conviene a los intereses de su país.

¿En qué influye Timoshenko?

La ex primera ministra ucraniana Julia Timoshenko cumple en la actualidad una condena de siete años de cárcel por abuso de poder y su figura se ha convertido en el punto de inflexión de las relaciones entre Europa y Ucrania. De hecho, el proceso que la juzgó es considerado por las autoridades europeas como «poco fiable» y la situación que vive en la cárcel también está siendo determinante. Así quedó reflejado el pasado 2012 con motivo de la Eurocopa , cuando varios líderes cancelaron visitas a Ucrania , por entonces uno de los dos países sede de dicho evento deportivo. El motivo fue el creciente malestar ante el maltrato físico denunciado por Timoshenko .

Ahora, permitir que la líder opositora pudiera someterse a tratamiento médico en el extranjero era una de las condiciones que había exigido la UE para la firma del acuerdo, además de avances encaminados a demostrar la lucha del país contra la justicia selectiva, entre los que se incluía el de Timoshenko.

Tras conocerse que Ucrania no firmaría, la que fue una de las inspiraciones de la llamada «Revolución Naranja» en 2004, anunció que iniciaba una nueva huelga de hambre como muestra de apoyo a las protestas de la calle. Su excarcelación además de la firma, es uno de los pilares de las demandas de la oposición ucraniana en la actualidad.