Israel ve improbable otra operación en Gaza próximamente a pesar de la tensión

«Israel no tiene ningún interes en aumentar la violencia con Gaza y una operación como la de Pilar Defensivo tan sólo ocurrirá si vemos una situación parecida a la que vivía la población del sur, con docenas de cohetes cada día», comentó el portavoz del ejército israelí, Roni Kaplan. «Sólo queremos que Hamás se atenga a su compromiso de no lanzar cohetes», afirmó Kaplan.

Aunque Hamás no se ha atribuido la autoría de los últimos lanzamientos, Israel culpa a la organización islamista de cualquier proyectil lanzado desde la franja. «Hamás es el soberano absoluto en Gaza, así que cualquier ataque desde la franja a Israel tiene su consentimiento», comentó el portavoz.

Israel no parece el único interesado en mantener la calma en su frontera. Según un canal de televisión israelí la organización está intentando controlar a los otros grupos islamistas en la franja, ya que está siendo presionado por Egipto, que negoció la tregua, para que ponga orden.

«Ahora mismo Hamás no quiere meterse en otra operación por que salió muy mal parado de la última y no quiere enfrentarse a los Hermanos Musulmanes en Egipto», aseguró un ex oficial del ejército israelí, que prefirió mantenerse en el anonimato.

«En la anterior operación en 2009, Plomo Fundido, vimos exactamente lo mismo, varios meses de calma y un retorno a la violencia, por que lo que quieren es probar hasta dónde pueden llegar y los límites de la paciencia de Israel», dijo el antiguo militar, señalando que no ve por ahora una respuesta contundente por parte del ejército israelí.

«Cuando Hamás quiere, puede poner coto a estos grupúsculos islamistas, así que si continúa la violencia contra Israel es por que ellos lo permiten».

A Israel ahora también le preocupa la revuelta situación en Cisjordania, donde las protestas han aumentado desde la operación Pilar Defensivo. La próxima visita este sábado del Secretario de Estado norteamericano John Kerry para intentar relanzar las charlas de paz, podría verse agriada por las violentas protestas en la zona desde que esta semana muriese un preso palestino en una cárcel israelí.

Según Israel, el hombre, llamado Abu Hamdiye, murió a causa de un cáncer terminal, mientras que la Autoridad Nacional Palestina culpa a Israel de haberle negado el tratamiento.

Durante las protestas del miércoles en Cisjordania ante la muerte de Hamdiye, dos jóvenes palestinos fueron abatidos por el ejército israelí cuando intentaban lanzar cócteles molotov a una base militar en la zona. Durante los funerales de los tres palestinos, se registraron disturbios violentos en varias ciudades de Cisjordania.

Según el ejército israelí, dado lo volátil de la situación, se está intentando no soliviantar más los ánimos de la población palestina.

«Estamos intentando contener los disturbios de la manera menos violenta que podemos y se ha dado orden de que no se use la fuerza a menos que sea imprescindible, como en el caso de los dos jóvenes que murieron el miércoles», señaló Kaplan.

«Los dos jóvenes llegaron corriendo y portando armas incendiarias, así que los soldados de la base se vieron obligados a disparar», explicó el portavoz, asegurando que a pesar de los disturbios el ejército no aumentará sus efectivos en Cisjordania.