Suscríbete a
ABC Cultural

Aníbal Barca, el inesperado genio de la guerra que dejó Roma al borde de la destrucción

Los romanos nunca entendieron el motivo de que su gran enemigo no hubiera intentado destruir Roma tras la batalla de Cannas y perpetuaron la imagen de un Aníbal a las puertas de la ciudad acobardado por el poder romano. Nada más lejos de la realidad

CÉSAR CERVERA

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Al final de su vida Aníbal Barca se vio obligado a exiliarse de Cartago y refugiarse en el Imperio Seleúcita. Allí sirvió como consejero militar y tuvo ocasión de encontrarse una vez más con su gran enemigo, Publio Cornelio Escipión «El Africano» ... , en un ambiente lejos de los campos de batalla. Los viejos rivales tuvieron una despreocupada discusión en Éfeso sobre quién era el mejor general de la historia. La respuesta de Aníbal fue inmediata: « Alejandro Magno ». Escipión estuvo de acuerdo, poniendo igualmente a Alejandro en primera posición. Después, preguntó a Aníbal a quién colocaría segundo. Éste respondió que a Pirro, porque consideraba que la primera virtud de un general era la audacia.

Artículo solo para suscriptores

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comparte esta noticia por correo electrónico
Reporta un error en esta noticia