5 fórmulas para elaborar tu propio limpiador y desinfectante casero

En GURMÉ ya te hemos dado un truco para limpiar tus sartenes en un minuto y que estén como nuevas , otro para retirar la grasa del extractor de la campana y otro para limpiar tus paños de cocina en dos minutos sin necesidad de poner la lavadora, entre otros muchos .

Pero por si eso fuera poco, hoy te traemos cinco fórmulas para que elabores tú mismo tu desinfectante casero y puedas aplicarlo no sólo en tu cocina, sino en toda tu casa. Estos trucos te sacarán de más de un apuro, ya que podrás elaborarlo con ingredientes que, estamos seguros, tienes en vuestra despensa. ¡Vamos a descubrirlos!

1. Limón

La propiedades antibacterianas del limón son de sobras conocidas. Empleado en numerosas recetas e infusiones, éste puede ser el ingrediente básico de un desinfectante casero.

En un pulverizador, mezcla un cuarto de taza de zumo de limón y un cuarto de jabón líquido del que empleas, por ejemplo, para lavar los platos. Luego, completa con agua caliente y ¡listo! Con esta mezcla puedes hasta desinfectar las paredes de cocinas y baños.

2. Bicarbonato de sodio

Es un clásico entre los clásicos. El bicarbonato se emplea para desengrasar, desinfectar, quitar olores, como los del frigorífico o blanquear. Pero ahora, además, nos va a servir para elaborar nuestro desinfectante casero.

En un pulverizador, echamos un cuarto de taza de bicarbonato y mezclamos con el zumo de dos limones. Luego, agua muy caliente y ya estaría nuestra fórmula. Pulveriza sobre las superficies que quieras limpiar y deja que actúen unos 10 minutos.

3. Vinagre blanco

El vinagre es otro de los productos que nunca suele fallar en la limpieza del hogar. Es un potente desinfectante, es económico y uno de los más respetuosos con el medio ambiente.

Para conseguir un producto que nos ayude a limpiar y desinfectar nuestra casa, mezcla un cuarto de taza de jabón líquido con un cuarto de taza de vinagre blanco. Luego, échalo en el pulverizador y llénalo de agua caliente. Esta fórmula te permite limpiar y desinfectar todo tipo de superficies, incluidas madera y cristales.

4. Árbol del té

Empleado habitualmente contra la pediculosis, el árbol del té también es un potente desinfectante natural.

Mezcla dos tazas de agua con dos cucharadas de aceite esencial del árbol del té. Agita bien la mezcla y ¡a limpiar!

5. Aceite de lavanda y vinagre

Y para la última fórmula hemos dejado una muy original elaborada con el aceite esencial de lavanda y vinagre blanco de limpieza.

Tan sólo necesitaremos media taza de vinagre y otra media de agua y unas gotas del aceite esencial para darle un aroma único.

Y tú, ¿cómo desinfectas tu casa?