Inés Arrimadas, con su nuevo novio en la Semana Santa de Málaga: besos y derroche de complicidad ante el Cristo de Mena

Además, la Reina Sofía ha sido otra de las personalidades destacadas. La madre del Rey Felipe quiso vivir este Jueves Santo desde primera línea el desembarco de la Legión para participar en el popular traslado y guardia del Cristo de Mena, conocido como de la Buena Muerte, en uno de los actos más esperados de toda la Semana Santa. El alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida, y su futura esposa tampoco se perdieron la cita.

Banderas y Doña Sofía coparon buena parte de las miradas de este Jueves Santo en Málaga pero no fueron los únicos: los asistentes a los actos de la Congregación de Mena también fueron testigos de la reaparición pública de Inés Arrimadas. La exlíder de Ciudadanos, alejada ahora de la vida política, acudió a ver el Cristo de Mena y lo hizo acompañada de su nuevo novio, con quien no dudó en mostrar actitudes cariñosas.

Hasta hace unos meses, de hecho, Arrimadas tenía una aparente vida feliz con Xavier Cima, un empresario catalán con la que llevaba seis años casada y había tenido dos hijos. La pasada primavera se habló de una crisis matrimonial y a finales de noviembre se conoció su separación definitiva. La sorpresa ha llegado ahora cuando, cinco meses después, ella ha reaparecido sin ocultar su nuevo amor.

Así, este jueves Arrimadas fue vista feliz y muy cariñosa con Guillermo Díaz, el hombre que parece que le ha robado el corazón. Él, abogado de formación (como ella) de 46 años, vive en Málaga y estuvo en Cs, por lo que posiblemente se conocieron allí. Díaz, de hecho, fue diputado en el Congreso durante tres legislaturas, hasta 2023.

Algunas especulaciones habían hablado de su acercamiento el pasado verano y el hecho de que ella se mudara, tras su separación, a vivir a su Jerez natal la acercó, con toda seguridad, a su nueva pareja. Ambos se habían conocido en el Congreso y tramaron una buena amistad y él no ocultaba la admiración que sentía por ella en sus redes sociales.

Ambos no escondieron su complicidad: se estuvieron dando besos y haciéndose selfies cariñosos, con momentos muy acaramelados, a la vista de todos, en uno de los palcos para las autoridades de los tronos procesionales, durante una de las citas más masivas de la Semana Santa en Málaga.