La herencia de Isabel II: quién se queda con sus joyas, propiedades y millones de libras

La monarca, una de las más longevas de la historia, cuenta con una gran experiencia a sus espaldas y ha estado presente en gran parte de los acontecimientos del siglo XX. Así, además de los movimientos sucesorios que conlleva su muerte, sus descendientes recibirán una suculenta herencia de la fallecida, que la convierte en una de las grandes fortunas de las realezas de Europa.

La fortuna de la familia real británica es uno de los grandes secretos de los Windsor. Según The Guardian, la propia Reina Isabel habría bloqueado una normativa del Gobierno que obligaba a hacer público las cantidades de dinero que posee la familia. Así lo revelan unos supuestos documentos encontrados en los Archivos Nacionales y fechados en noviembre de 1973, donde aseguran que los abogados de Isabel presionaron a los ministros del Ejecutivo conservador de Edward Heath para cambiar un proyecto de ley sobre transparencia.

Aunque se desconoce la fortuna concreta de la familia real británica, lo cierto es que algunos medios de comunicación británicos han estimado las cantidades a las que asciende la herencia de la Reina Isabel. De hecho, el Sunday Times considera que la familia Windsor podría tener más de 350 millones de libras, lo que supone unos 400 millones de euros. Por su parte, The Guardian cifra este dinero acumulado por la Casa real británica en más de 180 millones de libras, es decir, unos 211 millones de euros.

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Por su parte, la revista Forbes sitúo a la monarquía británica en el puesto 372 de la Lista de ricos en 2020, además de cifrar su patrimonio neto total en unos 28.000 millones de euros. Además, asegura Su Majestad deja más de 500 millones de dólares en bienes personales tras 70 años en el trono.

Además de este dinero que se estima, la Corona británica tiene un gran despliegue de propiedades por todo el territorio de Reino Unido, entre las que destacan el Palacio de Buckingham, el Castillo de Balmoral o Sandringham. Estas son algunas de las posesiones de la familia Windsor:

Tras la muerte de Isabel II, la pregunta es quién será ahora el heredero de la gran fortuna que deja la monarca tras de sí. Así, tal y como publica el portal Fortune, la mayor parte de su patrimonio personal pasará a heredarlo el nuevo rey, su hijo Carlos III de Inglaterra.

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Sin embargo, la fortuna de la Reina es compleja: la mayor parte de estas propiedades en realidad pertenecen a la llamada 'Royal Firm', el imperio de la familia real británica. Así, tal y como apuntan, el Rey Carlos solo recibirá los bienes personales designados específicamente por la Reina antes de su muerte.